La Diputación de Huesca reconocerá con el XXI Galardón Félix de Azara los estudios científicos sobre los efectos del cambio climático en las cuevas heladas del Pirineo, que se encuentran en riesgo de desaparición.

Con esta propuesta, la institución provincial tiene en cuenta la novedad de la investigación en un ámbito que la ciencia apenas había analizado antes y también de las conclusiones que aporta de este geosistema propio de alta montaña, único prácticamente en la Península Ibérica.

Aunque el resultado se ha hecho público recientemente, un grupo de científicos e investigadores del Instituto Pirenaico de Ecología (IPE-CSIC) y la Universidad de Zaragoza lleva más de una década en esta tarea, que deja constancia de la «valiosa información de las condiciones ambientales y climáticas de los últimos 6.000 años, del retroceso acelerado que están sufriendo las masas heladas y su contribución a los avances en las ciencias».

Las cuevas heladas son cavidades formadas en un sustrato rocoso que contienen agua en estado sólido, en forma de nieve o hielo.