La celebración del Primer Viernes de Mayo en Jaca permitió ayer la recuperación, después de nueve años, de las justas medievales (duelos a caballo con lanzas y escudos), que se celebraron en un palenque ubicado en las proximidades del Llano de la Victoria.

Las condiciones climáticas respetaron, pese a las predicciones en contra, la celebración de la fiesta tradicional más popular de la capital jacetana, el Primer Viernes de Mayo, en la que se conmemora la victoria de las huestes cristianas del Conde Aznar Galíndez sobre el ejército musulmán que intentaba conquistar estas tierras en el año 760.

Como es tradicional, la fiesta comenzó en el Llano de la Victoria donde se dan cita todos los jaqueses en el almuerzo y en la misa que se celebra en la ermita de la Victoria, ubicada en las proximidades, que ayer celebró, por vez primera, el obispo de la diócesis de Jaca y Huesca, Jesús Sanz Montes.

EL SINDICO PORTA LA BANDERA Aunque las nubes amenazaban la continuidad de los festejos, el desfile se desarrolló con normalidad con la presencia del cortejo histórico con el Conde Aznar a caballo, las autoridades y las escuadras por las calles del casco histórico de Jaca, a lo largo del cual pararon en la plaza de la Catedral para que cada una de las escuadras realizara el saludo de banderas ante la presencia del síndico, personaje clave de la fiesta que porta la bandera con el escudo de la ciudad.

En esta ocasión, fue el edil de Chunta Aragonesista, Ernesto Gómez, el que encarnó este papel, iniciando de nuevo la ronda establecida en la anterior legislatura cuando la corporación municipal acordó que fuera un concejal de cada uno de los cuatro partidos con representación en el ayuntamiento el que representara esta función cada año de mandato.

El desfile finalizó como es tradicional ante la puerta de la casa consistorial, tras el habitual saludo de banderas y la descarga de trabucos, con el himno del Primer Viernes de Mayo, indudablemente el momento más esperado por los jaqueses. Una verbena posterior puso fin a esta fiesta en la que este año, quizá al no coincidir con el puente festivo del Primero de Mayo, contó con la presencia de menos visitantes de los esperados.