El centro de acogida del Camino de Santiago, ubicado en la estación de Canfranc, abrirá sus puertas este verano para informar a los peregrinos sobre el tramo francés-aragonés, un recorrido que desde Aragón se quiere recuperar y que contará con una inversión de un millón de euros en los próximos tres años.

Esta es una de las medidas que se enmarca en la Directriz de Ordenación Territorial del Camino de Santiago, que detalló ayer el director de Ordenación del Territorio, Joaquín Palacín, en la comisión del ramo en las Cortes de Aragón. Todos los grupos parlamentarios han apoyado impulsar al tramo francés aragonés, que discurre desde Candanchú hasta el embalse de Yesa, pasando por Canfranc o Jaca, entre otros municipios, y han destacado el abandono que ha sufrido frente a la promoción de otros recorridos cercanos, como el navarro.

«Por eso, hemos presentado esta directriz», que incluye nueve estrategias, desde la recuperación del itinerario a la reactivación de los núcleos urbanos y actuaciones medioambientales, y que fue aprobada a finales del 2018, explicó. Una medida que está impulsada por el proyecto europeo de cooperación trasfronteriza Poctefa 2014-2020, que contempla una inversión de 3,1 millones de euros.