Responder a las necesidades actuales de los jóvenes de Teruel y de aquellos que acuden a estudiar a esta ciudad. Este es el principal objetivo del anteproyecto de rehabilitación de la residencia Luis Buñuel que tiene el Instituto Aragonés de la Juventud (IAJ) para este centro, que fue cerrada en el 2012 por el Gobierno anterior. La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, asistió ayer a la presentación del documento junto al director del IAJ, Adrián Gimeno, y el arquitecto que se ha encargado del mismo, Joaquín Liarte Camacho.

El anteproyecto constituye el primer paso para que la residencia vuelva a abrir sus puertas y lo haga con más y mejores servicios, adaptando el antiguo edificio a las necesidades actuales de los jóvenes de Teruel o que residen en la ciudad, según destacó el Ejecutivo autonómico en un comunicado.

Tras el cierre de la residencia en 2012 (inicialmente previsto para dos años para «proceder a su adaptación a la normativa contra incendios y de accesibilidad»), no se había llevado a cabo ningún tipo de actuación. El anteproyecto, que apuesta por la innovación funcional, tiene en cuenta las nuevas necesidades de los jóvenes, la tardía emancipación por falta de vivienda, la actual movilidad juvenil y la tasa de paro entre los jóvenes. Todo ello se materializa a través de una propuesta arquitectónica que reconoce los antecedentes históricos y constructivos del edificio, integrándolos en una solución global, creativa y dinámica que no se olvida de la figura y obra de Luis Buñuel.

La a rehabilitación del edificio está planteada en cinco fases, que podrán realizarse por separado o de forma conjunta. El objetivo es sacar el proyecto a licitación en el 2019 y que en el 2020 pudieran iniciarse las obras. El total de la superficie construida prevista es de 6.695 metros cuadrados.

La antigua residencia contaba con 160 plazas. En el anteproyecto de rehabilitación contempla 148 plazas, distribuidas en diferentes áreas. La residencia juvenil contará con 72 plazas individuales (la antigua residencia solo ofrecía habitaciones dobles), un albergue juvenil con 52 plazas y 12 unidades de emancipación (minipisos) para una o dos personas.

Por otra parte, se crearán espacios destinados a aulas de formación, iniciativas formativas empresariales y aulas taller para actividades lúdicas o formativas. El anteproyecto contempla también dos espacios que permitan la realización de eventos de todo tipo, así como una zona de coworking para emprendedores (12 despachos de trabajo).