Agentes de la Policía Nacional han identificado y detenido en Zaragoza a seis jóvenes de edades comprendidas entre los 15 y los 21 años, todos ellos vecinos de la capital aragonesa, por su presunta participación en distintos delitos de amenazas graves, de muerte, a través de WhatsApp.

Las investigaciones se iniciaron tras las denuncia interpuesta por un ciudadano que estaba siendo objeto de multitud de amenazas. Todas las que recibió eran graves, lo que provocó en la víctima un temor tanto por su vida como por la integridad de sus familiares y amigos, según señalaron desde la Jefatura Superior de Policía de Aragón en una nota de prensa.

Las primeras pesquisas se centraron en analizar todos los datos existentes en el medio tecnológico que se había empleado para transmitir las amenazas. El medio utilizado fue la aplicación disponible para smartphones denominada WhatsApp. Se tuvo conocimiento entonces de la existencia de un grupo creado entre usuarios de la aplicación en el que también se había incluido al destinatario de las intimidaciones.

Tras efectuar distintas gestiones, todas ellas bajo requerimiento judicial, así como después de recabar manifestaciones de los distintos testigos y del "exhaustivo" análisis e individualización de cada una de las amenazas vertidas, los investigadores identificaron plenamente a las seis personas partícipes en estos hechos delictivos. Ya identificados, procedieron a la detención de los seis componentes del grupo, entre ellos un menor de edad.

Las investigaciones se desarrollaron por el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Regional de Policía Judicial de Zaragoza de la Jefatura Superior de Policía de Aragón.

El uso masivo de esta aplicación móvil entre usuarios de todo el mundo ya ha llevado a publicar una guía con 8 recomendaciones para un buen uso de la app de mensajería instantánea y así evitar tanto fraudes como amenazadas de todo tipo. Un listado en el que se utiliza un tono cercano y de la calle. Entre los ocho puntos figura no dar el móvil a todo el mundo o no contestar a gente que contacta por esta vía para luego bombardear, bien para temas comerciales, tirarte los trastos- o acosar. Si contactan de forma invasiva, dicen, ignora. Si insisten, lo mejor es bloquear. Si hubiera delito (injurias, contra la intimidad, amenazas, vídeo sexual menores-), explican desde la Policía, hay que denunciar. Además, recuerdan que la hora de la última conexión es una forma de control que se debe evitar.