El embalse de la Sotonera, que recibió agua del Gállego por última vez a principios de junio, no presenta residuos de lindano, según dio a conocer la Comunidad de Regantes del Alto Aragón para informar a sus usuarios, tanto en hogares como en explotaciones agrícolas. Este hecho puede indicar que la aparición de restos de pesticida en el río se produjo en el periodo posterior, a lo largo del verano, es decir, en la época de máxima actividad para el traslado de la sustancia almacenada en el viejo vertedero de Bailín. "El agua de la Sotonera es potable", confirmó ayer César Trillo, presidente de los regantes del Alto Aragón, que urgió a encontrar una rápida solución al problema del lindano "porque pronto habrá que volver a llenar la Sotonera", que en la actualidad se encuentra a algo más del 50% de su capacidad. Este embalse está a cierta distancia del Gállego, al que se halla unido por un canal.