La aparición de las nuevas validadoras, aparte de la sorpresa inicial, ya han acarreado las primeras críticas. Por parte de los usuarios, que lamentan que no se indique en la pantalla el número de viajes que restan en la tarjeta, solo la cuantía sin consumir. Y de los conductores, que se niegan a realizar el obligatorio curso de formación fuera del horario de trabajo como les exige la empresa concesionaria.