Se llama Lara Gil Barranco y su nombre --como representante por Teruel-- ha completado la terna de candidatas que acudirán por Aragón a la final de Miss World Spain. Una cita que concentrará a finalistas de toda la geografía (incluyendo a Andrea Cristóbal, por Zaragoza, y a Mariana de la Rosa, por Huesca), desde mañana y durante una semana en la ciudad gaditana de Rota. Dice que sus grandes armas son su «personalidad» y su «capacidad para empatizar con los demás». Sin duda, sus medidas ayudan. Pero también es cierto que el certamen en el que esta aragonesa es finalista no solo se nutre de belleza y exige a sus candidatas que representen a una causa. En su caso, la elegida es la asociación Adala, una protectora que lucha por los derechos de los animales. Lara Gil, además, tiene entre sus prioridades su carrera. Acaba de terminar los estudios de Imagen y Sonido en Los Enlaces, de Zaragoza. Eso ayuda hasta delante de la cámara. «No soy sólo una cara bonita sino mi educación y cultura me permiten desenvolverme en cualquier situación que mi título requiera», reivindica. En unos días, el jurado decidirá.