Los vecinos del céntrico barrio zaragozano de El Gancho se han unido en una plataforma para tratar de aunar fuerzas y conseguir que las administraciones les escuchen y, lo que es más importante, actúen ante una continua degradación del mismo. Falta limpieza y seguridad, lo han reclamado ya de forma histórica, pero solo reciben promesas.
Resulta llamativo que una de las zonas en las que más invirtió el consistorio a través del Plan Integral del Casco Histórico (PICH) sea una de las más abandonadas, aparentemente, a día de hoy. Por eso se ha creado la Plataforma de Afectados de El Gancho que este domingo ha convocado una concentración entre el ayuntamiento y la Delegación del Gobierno en Aragón para ver si haciendo ruido y mostrando su unión consiguen que tomen cartas en el asunto. Desde la plataforma reclaman al consistorio que se incrementen las labores de limpieza para evitar que la sensación al pasear por sus calles sea la de dejadez y que actúe en los solares donde solo se acumula la basura y las ratas.
Pero también demandan la participación del Gobierno de Aragón y de la Delegación del Gobierno en Aragón ya que cada vez son más las viviendas okupadas, sobre todo por el entorno de la calle Pignatelli, donde sus vecinos conviven con peleas a diario y tienen que ver como se crean pequeños puntos de venta de droga.
«Uno no puede ir tranquilo porque siempre hay una cuadrilla de chavales merodeando por esa calle y no lo hacen por una buena causa», comentan desde la plataforma, que asegura que muchos vecinos tienen miedo de salir de sus casas, sobre todo por las noches. Una situación que dificulta la «convivencia» y que ha acabado por agotar su paciencia. Por eso anuncian que saldrán a la calle a denunciar su situación hasta que las Administraciones den un paso adelante y pasen de las promesas a los hechos.
«No queremos irnos de nuestro barrio, lo que se tiene que ir a la delincuencia», resuelven.
