Faltan dos semanas para que el Real Zaragoza vuelva a ponerse en marcha y, al menos, siete fichajes para completar la plantilla y que haya, como anunció Lalo Arantegui, dos jugadores por puesto. Entre ellos han de estar algunas de las piezas clave del equipo de Natxo González, casi todas las del medio del campo hacia adelante, también la más codiciada, la más difícil de conseguir y la que requiere el mayor esfuerzo económico: un delantero de referencia.
El Real Zaragoza cuenta, a día de hoy, con 15 futbolistas en la primera plantilla que estarán seguro el próximo curso. Los cinco que siguen (Zapater, Valentín, Ros, Ratón y Pombo), los cuatro que suben del filial (Raí, Lasure, Delmás y Zalaya) y las seis incorporaciones ya cerradas (Benito, Martínez, Grippo, Buff, Eguaras y Papunashvili). Con todos esos nombres y pendientes de la llegada de un central más, el entramado defensivo del nuevo Real Zaragoza está casi al completo, así como el puesto de mediocentro.
A Lalo Arantegui le falta por tanto construir el armazón ofensivo del equipo, que actualmente cuenta con Pombo como extremo izquierdo, Papunashvili en la otra banda y Raí en la punta. El director deportivo debe encontrar aún otros tantos extremos para completar las alas y, lo más importante, un delantero de referencia y otro acompañante.
Acertar en la incorporación del nueve titular, así como en la del portero, se antoja como fundamental para que el equipo pueda tener éxito la próxima temporada. Ese es el principal trabajo que tiene por delante Lalo Arantegui que, además, pretende tener el 80% de la plantilla completa para el 10 de julio, día de inicio de la pretemporada. El director deportivo tiene también otra ardua labor por delante, lograr la salida de los once futbolistas que tienen contrato en vigor y con los que no cuenta el club.
