La situación de los tres jugadores aragoneses que tendrán que abandonar el Real Zaragoza, debido a las restricciones que ha puesto la Liga de Fútbol Profesional en cuanto al número de fichas, ha generado polémica en el entorno del club. Ha llamado la atención la decisión de ceder a Adán Pérez, que había firmado contrato con el primer equipo este verano, pero esa situación también ha afectado a otros hombres como José Javier Barkero, que había llegado a un acuerdo con el club para quedarse pero que finalmente tendrá que marcharse.

Toda la situación viene derivada de las restricciones impuestas por la Liga. Martín González había llegado pactado con el vasco, que cobra unos 400.000 euros, que percibiese la ficha a plazos, de tal manera que el club no tuviese dificultad para afrontar los pagos. Barkero dio facilidades para llegar al acuerdo, antes de que se conociese la famosa circular y de que Víctor haya preferido contar con otros. Ahora tendrá que buscar no solo un nuevo acuerdo, sino un equipo.

Fue Martín González quien explicó ayer la situación de todos estos futbolistas. "El tema de las 18 fichas nos ha condicionado mucho. Si hubiésemos tenido 25, Adán nunca hubiera salido del Zaragoza. Pero yo no hago distinciones entre los jugadores de casa y de fuera. Miro por el interés del equipo. Me hubiese encantado que se quedase Adán, pero en esta situación no podemos permitir que el Real Zaragoza se meta en problemas. Hay que tener jugadores que rindan desde el minuto 1".

Las limitaciones ordenadas por la Liga, anunciadas mediante una circular del 21 de julio, antes de que llegara Martín González e incluso los nuevos propietarios, han obligado al Zaragoza a replantear su idea inicial. "Por ejemplo, vamos a tener que contar con tres centrales en lugar de cuatro, y con tres laterales en lugar de cuatro".