La estadounidense Simone Biles se convirtió ayer en la primera gimnasta de la historia que consigue cuatro medallas de oro mundiales en un concurso general al imponerse en Doha (Qatar) con una puntuación de 57.491. El cálculo renal que sufrió la norteamericana en vísperas del comienzo de la competición no lastró su rendimiento, que ha estado con la mejor nota en tres de las cuatro finales por aparatos (solo en asimétricas le ganó la belga Nina Derwael) y ayer dominó con holgura el ‘All around’, concurso general individual.

Biles obtuvo las siguientes puntuaciones: 14.533 en salto, 14.725 en asimétricas, 13.233 en barra de equilibrios y 15.000 en suelo para un total de 57.491. La reina de la gimnasia artística no necesitó la perfección para superar al resto. Cometió fallos en salto, barra de equilibrios y suelo, pero su ventaja en dificultad le condujo al título con 1.693 puntos de margen sobre la japonesa Mai Murakami.

La norteamericana prolonga, de esta forma, su racha victoriosa, que comenzó en los campeonatos nacionales del 2013 e incluye cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016.Murakami fue mejor que Biles en salto y barra de equilibrios y, aunque el margen le fue insuficiente para alcanzar la victoria, al menos se llevó la medalla de plata con 55.798.

La estadounidense Morgan Hurd, campeona del mundo el año pasado en ausencia de Biles, subió al tercer peldaño del podio con una puntuación de 55.732, dejando fuera del cajón a Derwael (55.699) y a la número uno rusa, Angelina Melnikova (55.698). Biles regresaba en Doha a la competición internacional tras el año sabático que se tomó tras los juegos de Río 2016. La sevillana Ana Pérez, de 20 años, única española clasificada para el concurso general, fue la 23ª.