Cuarta jornada de Liga. Paulo César Wanchope Watson (Heredia, Costa Rica, 31-7-1976) coge el balón fuera del área, le hace un sombrero a un defensa y sin dejar caer la pelota conecta un disparo que se cuela por la escuadra. La Rosaleda se llena de pañuelos. Ha nacido la fiebre Chope , la gran amenaza para el Madrid, que hoy visita el feudo malagueño (19.00 h., PPV).

En sus 1,93 metros de altura se esconde una persona tranquila, que no es ajena a todo el movimiento que se ha desatado en su país. El espigado delantero sabe que 22.000 costarricenses participaron en un concurso cuyo premio consistía en viajar a Málaga para presenciar el choque ante el Madrid. Los tres agraciados podrán ver esta tarde en acción a su gran ídolo. Tienen suerte de que a los 20 años la estrella costarricense, que por entonces triunfaba en el Herediano de Costa Rica, no decidiera colgar las botas para dedicarse a su otra gran pasión, el baloncesto, lo que estuvo a punto de hacer tras una fallida prueba con el conjunto inglés del Queens Park Rangers.

Tuvo más suerte en el Derby County, que le fichó en marzo de 1997. Allí marchó 23 goles en tres temporadas. En el West Ham United, equipo que pagó 3,5 millones de libras por él, también dejó su huella, con 10 tantos en una campaña. Tampoco le fue mal en su estreno en el Manchester City, donde llegó en el 2000. En su primer partido marcó tres goles.

No era la primera vez que el Málaga había puesto sus ojos en este jugador. Ya lo hizo hace dos temporadas, pero el elevado precio y un problema en un hombro frenaron la operación. Pero el club mantuvo su apuesta. Y este año, después de superar una operación de menisco en enero y tras pagar 800.000 euros al Manchester City, Wanchope ya es el ídolo del Málaga. Allí percibe un millón de euros brutos de ficha.

Como un pívot

Pese a parecer torpe con el balón en los pies, sabe usar su cuerpo casi como un pívot de baloncesto y tiene la habilidad de fabricarse la jugada. Lleva cuatro goles, pero espera pasar de 15. "Los galácticos no me asustan. Son de carne y hueso, como nosotros. Amoroso y yo no somos menos que Raúl y Ronaldo", dice Wanchope, que confía en terminar con la racha del Málaga, que lleva 21 años sin ganar al Madrid. El delantero espera estar a la altura, como en su país, donde le comparan con Raúl por el gran peso que tiene en la selección.