La Eurocopa sigue cobrándose nuevas víctimas. Rudi Völler presentó ayer su dimisión como seleccionador alemán. Völler, de 44 años, ha entendido la sensación de fracaso que se respira en Alemania después de quedar eliminada en la primera fase y no desea ser un obstáculo para el futuro. Alemania organizará el Mundial-2006 y Völler no quiere iniciar un proyecto en el que se implicarán todos los estamentos sociales, políticos y económicos del país con la credibilidad por los suelos. Por eso dimitió ayer por la mañana. Alemania ya piensa en el exentrenador del Bayern de Múnich, Ottmar Hitzfeld, de 55 años, como posible sustituto. "Después de la dimisión de Völler, sería un paso lógico en mi carrera que yo me convirtiera en seleccionador alemán", declaró ayer Hitzfeld, apodado El General , al periódico Die Welt .

Los números avalan a Hitzfeld. Es el entrenador alemán con mejor currículo a nivel de clubs después de ganar la Liga de Campeones con el Borussia Dortmund en 1997 y con el Bayern de Múnich en el 2001. Los alemanes creen que si le dejan trabajar tranquilo puede recuperar a una selección que, más allá del problema del bajo nivel de sus delanteros Kuranyi, Bobic, Klose y Brdaric, ha ofrecido una imagen patética en Portugal. Sólo Ballack ha salvado la cara. Y sobre él debe construirse la Alemania del futuro.

Un proyecto para el que no se veía capacitado Völler. "En los próximos meses habrá partidos amistosos en los que se presentará más de una dificultad, habrá más de una derrota, y a mí no se me concedería el crédito que hace falta cuando se ha perdido un encuentro para probar cosas nuevas. La persona que llegue debe tener la libertad de hacer las cosas que quiera. Al menos el futuro no está tan negro como el que yo heredé", declaró Völler, que sustituyó a Erich Ribbeck hace cuatro años y que se marcha dejando en el recuerdo la final del pasado Mundial, que Alemania perdió contra Brasil en Tokio.

Al contrario que Iñaki Sáez, Völler convocó a los periodistas para anunciarles su marcha. "Voy a dimitir de mi puesto", dijo emocionado, para añadir que la decisión no la había tomado tras la derrota ante la República Checa. "Lo tenía en la cabeza desde antes", aseguró. "Lamentamos esta decisión pero la respetamos", comentó el presidente de la Federación Alemana (DFB), Gerhard Mayer-Vorfelder, que acompañó a Völler en la rueda prensa. Alemania piensa ya en el Mundial del 2006, en el que deberá presentarse con un equipo de garantías.

NUEVA GENERACION Völler no deja, al menos, una selección hundida como la que le traspasó su predecesor. Los jóvenes valores como Lahm, Schweinsteiger, Podolski y Hinkel deben ser la base de un proyecto de futuro en el que también estará Metzelder, ausente por lesión en Portugal. El nuevo seleccionador, eso sí, tendrá que prescindir de la vieja guardia que forman hombres como Kahn, 35 años, y Wörns, de 32.

Otro de los candidatos a ocupar el banquillo alemán es el actual seleccionador de Grecia, Otto Rehhagel. Ayer, el entrenamiento de los griegos en Lisboa, donde hoy juegan el partido de cuartos de final contra Francia, se llenó de periodistas alemanes en busca de su opinión. Y el Rey Otto , tan parco como siempre en sus respuestas, casi los trituró con la mirada. "¿Seleccionador alemán? Por favor, a mí sólo me interesa Grecia. Estoy aquí para ganar la Eurocopa y no para pensar en otras cosas", declaró Rehhagel.