Trece goles ha recibido el Zaragoza en las seis últimas jornadas, el segundo que más tras el colista Albacete (14) en este tramo, pero es que además las 19 dianas encajadas en total le hacen ser el sexto equipo más goleado de Segunda. Son números impropios para alguien que ahora roza la promoción de ascenso, de la que esta solo a un punto. El equipo, que fue capaz de dejar su portería a cero tres encuentros seguidos --Alavés, Llagostera y Mallorca-- lleva ahora seis consecutivos encajando y mostrando una preocupante flojera.

En esas seis últimas citas, Lugo, Tenerife y Sporting le hicieron tres dianas, mientras que dos le hizo el Betis y una el Alcorcón y el Racing. Suponen un promedio de dos por partido, teniendo en cuenta que en las siete primeras jornadas el Zaragoza había encajado solo seis goles, cuatro de ellos ante el Barça B, y había sido capaz de dejar la portería cerrada en cuatro de las siete primeras citas --A Alavés, Llagostera y Mallorca hay que añadir el debut ligero ante el Recre--.

Y es que el Zaragoza es el que más remates recibe de toda la Segunda, con 144 disparos en contra en 13 encuentros y una media de 11, muy por delante del Valladolid, que ha recibido 121 y es el segundo en ese ránking. Así, tiene que cortar la sangría de goles y remates porque está tapando su capacidad en ataque. En estos seis últimos partidos el equipo ha anotado 13 goles, un buen número, más que suficiente, por lo que el problema está en la seguridad defensiva, aunque también en el fútbol.

El Zaragoza debe mejorar con el balón --es el equipo que más veces lo pierde--, pero ante todo tiene que recuperar el espíritu solidario en defensa que exhibió en algunos momentos de esta Liga. Con eso y con su capacidad arriba tendrá mucho ganado para retornar a las plazas de promoción o hasta para pensar en el ascenso directo. Si, en cambio, insiste en su línea actual será difícil cambiar dinámicas como la que lleva ahora, con 3 jornadas sin ganar y un punto de 9.