La sección sindical de UGT-Aragón en Opel España ha denunciado la vigilancia que ha realizado la empresa a trabajadores que estaban en situación de incapacidad transitoria. Según señaló el sindicato en un comunicado, la compañía ha hecho uso de estas prácticas --a través de detectives con cámaras-- para controlar a empleados que, pese a estar de baja, bajo su criterio "lo están sin causa o puede dar motivos de dificultar su proceso de recuperación y, por ello, ser despedidos".

El sindicato añadió que, en las investigaciones con resultado positivo, el afectado era despedido "de manera fulminante", siendo un Tribunal de lo Social quien decide con posterioridad si el despido era procedente o improcedente. UGT recuerda asimismo que las bajas y altas son facultad de los médicos y de los inspectores de la Seguridad Social y, por ello, va a proponer al comité de empresa que "denuncie esta práctica persecutoria anómala, en el juzgado que corresponda".