Más vida en cada historia ha sido el lema del Día de las Librerías, que se celebró ayer en toda España y, también en Zaragoza. La jornada sirvió para reivindicar las librerías como espacios con una intensa actividad cultural, con presentaciones de libros, firma de ejemplares, encuentros con autores, conferencias, recomendaciones o maridaje entre letras y vinos. «Esta jornada sirve para hacernos notar», aseguró Óscar Martín, presidente de la Asociación de Librerías de Zaragoza. Las actividades son algo que «interesa a todo el mundo, al comercio porque engancha al lector y fideliza clientes; a las editoriales y autores porque es llamativo y al público porque le gusta que cuando va a una librería el autor le cuente cómo ha vivido ese libro».
Esta jornada sirve también para mostrar «cercanía con el lector, ya que recomendamos, guiamos...», pero no solo un día sino que «somos libreros todo el año»; y todo el año aconsejan, recomiendan y animan a la lectura a todo aquel que se acerca hasta ellos. Y más en unas fechas próximas a la Navidad, en la que ofrecen «un gran muestrario de libros».
Martín destaca dos iniciativas puestas en marcha por Cegal (Confederación Española de Gremios y Asociaciones de libreros), no nuevas pero quizá desconocidas. Una es la plataforma todostuslibros.com, que es «la mayor librería virtual de España», que incluye a más de 700 librerías, que vuelcan ahí sus títulos. Un lector puede buscar uno y ver donde está disponible en su ciudad; una lista de los más vendidos y también «recomendaciones. Los libreros leemos y los que nos gustan los recomendamos».
El otro, el Club Kirico para formentar la literatura infantil. Actualmente «hay más edición y son ediciones muy cuidadas», reconoce el presidente de las librerías zaragozanas. «Siempre ha tenido un volumen de ventas altas porque se incentiva el consumo dentro de los propios centros escolares; y por las familias, que están concienciadas de que es positivo que los jóvenes lean». Asegura que los chicos acceden fácilmente a máquinas, series..., pero aún así, «la literatura sigue enganchando. A un chico le pones un libro en las manos y deja lo que está haciendo».
FEDERACIÓN ARAGONESA
Tras un proceso largo, administrativo y de firma de estatutos, los libreros aragoneses han querido hacer coincidir la celebración del Día de las Librerías con la presentación de la Federación Aragonesa de Gremios y Asociaciones de Librerías (Fagal), que engloba a las tres asociaciones provinciales.
Era necesario para «estar representados por un ente único a la hora de comunicarse» con el Gobierno y las Asociaciones de Padres en el caso de los libros de texto, por los programas de ayudas y becas que van evolucionando».
Martínez considera que desde el punto de vista económico, el Banco de libros de texto es negativo porque implica «menos ventas»; pero por otro lado los padres y las asociaciones de padres pueden demandarlo «y nosotros queremos ser partícipes porque estamos incluidos en la cadena del libro. Además, «patalear y oponernos no tiene mayor sentido; creemos que hay iniciativas más viables y ya lo hemos comunicados, pero este es el que hay y queremos colaborar y ser los que gestionamos y proveamos a los colegios de esos materiales».
Otro de los objetivos de la Federación es que «en las capitales hay más librerías asociadas, pero en el resto es más complicado y queremos que se asocien». En el caso de las pequeñas localidades «si desaparece la librería, que vive de más cosas, la gente tiene que recurrir a desplazarse o a la compra por internet».
