La Real Academia de la Historia perdió en la noche del domingo al que ha sido su director desde 1998, Gonzalo Anes de Castrillón, impulsor en los últimos años de su mandato de la publicación de los primeros 25 tomos del Diccionario Biógrafico Español, al que le rodeó una gran polémica por el contenido de algunos de sus textos. Al frente de la dirección de dicha institución, Anes será sustituido por el historiador y actual vicedirector de la Academia, el zaragozano Faustino Menéndez Pidal de Navascués, hasta que se celebren nuevas elecciones en diciembre.

Gonzálo Anes de Castrillón (Trelles --Coaña-- Asturias, 1931) está considerado como una de las grandes figuras de la Historiografía contemporánea. Fue también catedrático de Historia e Instituciones Económicas en la Complutense y presidente del Patronato del Museo de Prado. Obtuvo premios como el Nacional de Historia, premio de Economía Rey Juan Carlos, premio Rey Jaime I de Economía y estaba en posesión de la Gran Cruz de la Orden Alfonso X el Sabio y de la Gran Cruz de Isabel la Católica, entre otras distinciones españolas y extranjeras.

La elaboración del Diccionario Biográfico fue uno de los grandes pilares de su mandato y también una de sus obras más controvertidas. Un hecho que llevó al Gobierno a pedir a la Academia que revisara el Diccionario: en 2011, fue la ministra del Ejecutivo socialista Ángeles González-Sinde y, en 2012, su sucesor del PP, José Ignacio Wert, quien en una comparecencia el 30 de mayo de ese año en el Congreso de los Diputados, instó a cambiar "en profundidad" 14 entradas, que 16 fueran ligeramente revisadas y una eliminada, sin precisar los nombres de los personajes afectados.

Una de las entradas que más polémicas causó fue la del historiador Luis Suárez que decía de Francisco Franco que "montó un régimen autoritario pero no totalitario", o la Carlos Seco que afirmaba que el gobierno del socialista Juan Negrín, fue "prácticamente dictatorial".