El consejero de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Jerónimo Blasco, ha anunciado hoy que dada la posibilidad de interpretación que ofrece el decreto de espectáculos públicos de Aragón se permitirá la entrada a los menores en aquellas actividades de índole cultural y musical.
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy el decreto de espectáculos públicos ocasionales y extraordinarios con el objetivo de garantizar la seguridad de la ciudadanía, con medidas especialmente dirigidas hacia los menores.
Garantizar la seguridad en ámbitos como el personal de admisión, el control automático de los accesos o las medidas de prevención y extinción de incendios son algunos de los puntos que incluye el decreto, que desarrolla la Ley de Espectáculos Públicos en Aragón.
El texto clarifica también las competencias, de forma que serán los ayuntamientos los encargados de autorizar la celebración de los espectáculos públicos, salvo que el evento se desarrolle en más de un término municipal, que será el Gobierno de Aragón.
Asimismo, se incluyen medidas para garantizar la seguridad de los menores, que podrán acceder a los espectáculos públicos en los que se venda alcohol si van acompañados de sus padres o tutores, y también podrán acceder solos si se establece una zona sin alcohol en la que podrán estar los menores y los adultos.
El decreto se aplicará en los espectáculos montados por organizadores privados y no afecta a los que se organicen por los ayuntamientos o por las comisiones de fiestas, ya que los consistorios no pueden concederse autorizaciones a sí mismos, si bien tendrán que tomar todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de las personas.
Respecto a las fianzas, el texto definitivo prevé una rebaja sustancial respecto al borrador, de forma que para espectáculos con un aforo hasta 500 personas será de 1.000 euros; de 501 personas a 1.000 será de 2.000 euros; de más de 1.000 personas de 3.000 euros y por cada incremento de público de más de mil personas serán mil euros hasta un límite máximo de 18.000 euros.
El consejero de Política Territorial e Interior, Antonio Suárez, ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que el decreto tiene como finalidad reforzar las medidas de seguridad para toda la ciudadanía en los espectáculos públicos ocasionales y extraordinarios, a los que suele acudir mucha gente, y por tanto requieren especiales medidas de seguridad.
Eso, ha agregado, haciéndolo "perfectamente compatible" con el derecho de los organizadores de esos espectáculos a promoverlos.
En ese sentido, ha afirmado que el objetivo del Gobierno con este decreto es dar seguridad jurídica a los organizadores para que tengan "muy claro" qué se les puede exigir y a las administraciones que tienen que autorizar los espectáculos, que en su mayor parte son los ayuntamientos, qué pueden exigir.
A la vez, se regula un procedimiento que estaba "muy en el aire" sobre los plazos, de forma que quien quiera promover un espectáculo tendrá que presentar la documentación necesaria con una antelación mínima de un mes y la administración deberá resolver en veinte días hábiles desde que se presenta la solicitud.
El texto, ha apuntado, cuenta con el informe favorable del Consejo Consultivo de Aragón, que resalta entre otros aspectos que en su tramitación, que ha durado entre siete y ocho meses, se ha tenido un exquisito trato en las cuestiones jurídicas y que se ha dado audiencia a todos los colectivos que tenían algo que aportar.
Además, ha asegurado que el Consejo Consultivo entiende que este decreto no va en contra del empleo y la promoción de la cultura como se argumentaba en una de las alegaciones que se presentaron contra el decreto.
En cuanto a la posibilidad de que el Ayuntamiento de Zaragoza y la Mesa de la Música recurran el decreto, el consejero ha indicado que pueden hacer lo que consideren, pero a su juicio el dictamen del Consejo Consultivo de Aragón es "muy contundente" y llega a ponerlo como ejemplo de cómo debe tramitarse un decreto.
