La Constitución europea, en un reality show . El Gobierno utiliza desde anoche el programa de Tele 5 Gran hermano para divulgar la Carta de la UE. Paradójicamente, la iniciativa se pone en marcha en plena guerra del Ejecutivo contra la telebasura.

María Teresa Fernández de la Vega ha dado personalmente el visto bueno del Ejecutivo a una idea que partió de la presentadora del programa, Mercedes Milá, según confirmaron fuentes de la vicepresidencia. La Moncloa sostiene que la experiencia "contribuirá a dignificar el programa" de Tele 5, y de paso resultará "útil" al empeño del Ejecutivo para divulgar entre la ciudadanía el contenido de la Constitución europea.

Las citadas fuentes aseguran que a De la Vega le parece "muy digno" que Gran hermano realice una "labor pedagógica" en un tema tan arduo como la Constitución europea. Y recuerdan que el programa que conduce Milá concita la atención de hasta cinco millones de espectadores cada jueves. También rechazan que la iniciativa choque con la campaña gubernamental contra la telebasura, y aducen que si "de paso" se contribuye a "dignificar el programa" el Gobierno habrá matado dos pájaros de un tiro.

La idea se le ocurrió a Milá durante una conversación con De la Vega en un acto social en el que coincidieron, según confirmaron ayer la presentadora y la vicepresidencia.

PROPUESTA DE MERCEDES MILA Durante la charla, De la Vega manifestó las dificultades del Gobierno para divulgar la Constitución europea entre los ciudadanos. Explicó a la presentadora que la ley española impide al Ejecutivo hacer campaña a favor del y que el exiguo presupuesto de que dispone el Estado no permite una gran campaña de concienciación sobre el nuevo tratado europeo. A Milá se le ocurrió entonces incluir el conocimiento de la Carta de la UE como una de las pruebas que deben superar los concursantes de Gran hermano . Y a De la Vega le pareció "genial". Tras discutirlo con la productora y el director del programa, uno de los guionistas diseñó la prueba: los inquilinos de la casa de Guadalix empezaron anoche a estudiar el texto constitucional y deberán explicárselo a una concursante polaca que no habla español.

"Yo sólo recogí la inquietud de la vicepresidenta. El Gobierno no sabe en qué consiste la prueba", explicó ayer a este diario la presentadora del concurso. La iniciativa sorprende por las críticas que recibe el programa de Tele 5 --del que se emite la sexta edición--, en el que se suceden insultos y actitudes soeces entre los concursantes. Máxime cuando el Gobierno está inmerso en negociaciones con las televisiones privadas para erradicar la telebasura de la programación.

Milá mantiene que De la Vega "no puso ninguna reticencia" a incluir en el guión del reality show la Constitución europea. "Por fin se dan cuenta de que Gran hermano es una buena plataforma para llegar a todo el mundo", defendió la presentadora. "Si contribuye a divulgar la Euroconstitución, pues muy bien", añadieron en la Moncloa.