Javier Solana, secretario del Consejo de la Unión Europea, envió a los embajadores de los países miembros de la UE la semana pasada, poco antes del atentado de Madrid, un informe interno en el que denuncia duramente la falta de coordinación de los gobiernos en la lucha contra el terrorismo y cita específicamente que las agencias europeas de seguridad en el sector de los transportes, sobre todo los ferrocarriles, "están poco o nada dotadas de medios y objetivos".

El documento, que no fue discutido en su momento porque faltaba la evaluación de la Comisión Europea, subrayaba que los transportes pueden ser "blanco de ataques terroristas o utilizados como medio de transporte de terroristas y armas".