Un tribunal indio ha condenado hoy a 24 hombres a diferentes penas de prisión por violar unas 60 veces a una joven de 16 años hace dos décadas en los estados de Kerala y Tamil Nadu, en el sur de la India.

Según el canal delhí NDTV, el tribunal de Kerala ha condenado a cadena perpetua al cabecilla del grupo, Dharmarajan, un abogado de unos 40 años que orquestó la violación múltiple de la joven en hoteles, casas y automóviles después de que la secuestrara un conductor de autobús.

"Me encuentro feliz y aliviada porque se ha hecho justicia y porque ahora todo el mundo conocerá la verdad", ha afirmado hoy la víctima de la violación en el juzgado. La lucha solitaria de esta mujer y su familia por obtener justicia ha durado 18 años.

En el 2005, en la primera sentencia tras la violación, 34 de los 35 acusados de haber participado en el asalto sexual fueron absueltos por el Tribunal Superior de Kerala, aunque la joven no se dio por vencida y llevó el caso al Tribunal Supremo. Este tardó ocho años en celebrar una audiencia y en enero del año pasado obligó al Tribunal de Kerala a repetir el juicio, del que fue pronunciada hoy la sentencia. Cinco de los acusados fallecieron durante los 18 años que duró el proceso judicial.

Esta condena llega el mismo día en el que un tribunal de Bombay sentenció a la pena de muerte a tres hombres que violaron a una fotógrafa en agosto del 2013, un mes después de que agredieran sexualmente a otra joven en esa ciudad, en el oeste de la India.

Hoy se ha comocido también, sin embargo, una sentencia de signo completamente diferente. En el estado de Bengala, en el este de la India, una mujer se suicidó el miércoles prendiéndose fuego después de que una corte vecinal castigara a su violador con el gesto de pedirle perdón tocándole los pies.

Las informaciones sobre violaciones en la India aparecen cada día en los medios de comunicación, fruto de la conciencia creada por la violación en grupo y muerte de una estudiante universitaria en Delhi el 16 de diciembre del 2012. Esa violación generó protestas y abrió un debate sin precedentes sobre la situación de la mujer en el país, lo que llevó al Gobierno a endurecer las leyes contra los agresores sexuales.