Después de su victoria en la votación del comité central del Likud, el primer ministro israelí, Ariel Sharon, convocó ayer al líder del Partido Laborista, Shimon Peres, y al de los partidos ultraortodoxos Shas y Judaísmo Unido de la Torá (JUT) para negociar un Gobierno de unidad nacional. Una coalición entre los dos grandes partidos israelís y las formaciones religiosas evitaría la convocatoria de elecciones anticipadas y permitiría a Sharon sacar adelante su plan de evacuación de los asentamientos de la franja de Gaza.

No era exagerada la euforia con la que los partidarios de Sharon celebraron la victoria del jueves por la noche en el comité central, que dio el visto bueno a las negociaciones con los laboristas. Esta vez, a diferencia de ocasiones precedentes, los rebeldes del Likud que se oponen al plan de separación de Sharon no lograron derrotar al primer ministro.

Dando muestras de una firmeza y astucia más que notables, Sharon ha convertido una serie de derrotas, que habían dejado a su Gobierno en minoría, en una gran victoria. Este triunfo, con la ayuda de Peres, le deja las manos libres para evacuar Gaza. Por el camino ha dejado a la línea más dura de su partido, a sus socios ultranacionalistas y de ultraderecha y al partido laico Shinui.

Los detalles que faltan por ultimar son de menor enjundia. El domingo, la dirección laborista debe dar su visto bueno a las negociaciones y convocar lo más tarde posible las primarias para elegir a su líder, ya que Peres es desde hace más de un año su líder provisional. Después, empezarán las negociaciones, en las que los laboristas ya han anunciado que no piensan exigir las carteras de peso --Defensa y Exteriores-- y que se conforman con el cargo de viceprimer ministro para Peres, y carteras como la de Interior, Educación e Infraestructuras.

ELECCIONES PALESTINAS Tras entrevistarse con el candidato presidencial palestino Maruán Barguti en la cárcel, el diputado árabe israelí Talib al Sana dijo ayer que el dirigente palestino ha decidido retirar su candidatura a cambio de acometer ciertas reformas en Al Fatá. Ningún miembro de la candidatura de Barguti confirmó la noticia.

Mientras, una niña palestina de seis años murió en Jan Yunis cuando el Ejército respondió a un ataque contra un asentamiento.