Un tiroteo ocurrido este martes en la ciudad belga de Lieja ha dejado al menos cuatro muertos y dos heridos. Se trata de dos policías, una tercera persona que transitaba por el lugar de los hechos en su coche y el atacante, que ha sido identificado por la prensa belga como Benjamin Hermans, que ha sido abatido posteriormente por agentes de la policía. Las autoridades trabajan con la hipótesis de que sea un ataque terrorista y según varios medios locales el hombre gritó Allahu Akbar (Alá es grande) aunque todavía no ha sido confirmado.

Eran las 10.30 de la mañana cuando ha comenzado a disparar contra dos agentes de policía a la altura del café des Augustines, en el centro de esta ciudad de Valonia. Según la información que ha trascendido hasta el momento, el joven habría huido y se habría colado en el instituto Léonie de Waha donde habría tomado como rehén a una señora de la limpieza.

La policía ha reaccionado con rapidez. Los estudiantes, que no han estado en contacto con el atacante en ningún momento, han sido trasladados por seguridad y se ha desalojado el bulevard d’Avroy, en pleno centro de la ciudad, entorno al cual se ha establecido un perímetro de seguridad. Durante la intervención policial, la célula de policía local (PAB) ha abatido al atacante. Dos agentes han resultado heridos.

La fiscalía federal ha asumido el caso lo que significa que las autoridades dan peso a la hipótesis de que haya sido un ataque terrorista. Según la radio RTBF, el autor del ataque se llama Benjamin Hermans, un joven de 36 años originario de la localidad de Rochefort, que habría salido este mismo lunes de la prisión de Lantin, donde estaría encarcelado por delincuencia común, gracias a un permiso penitenciario.

Lieja, una ciudad industrial cercana a la frontera alemana en la región de Valonia de habla francesa, también fue escenario de un tiroteo en 2011, cuando un hombre armado mató a cuatro personas e hirió a más de 100 antes de dispararse.

Las imágenes en las redes sociales mostraron a las personas corriendo por seguridad en el bulevad central de Avroy, en Lieja, con los disparos y las sirenas sonando de fondo. Un vídeo mostró a dos policías con chaleco antibalas tratando de neutralizar al autor del atentado.

El primer ministro belga, Charles Michel, que sigue muy de cerca lo ocurrido a través del centro de crisis ha calificado de grave el incidente y ha mostrado su solidaridad con la familia de las víctimas. “Todo nuestro apoyo a las familias de las víctimas”, ha trasladado poco antes de partir hacia Lieja. También el ministro de interior se ha solidarizado. “Nuestros pensamientos están con las víctimas de este acto atroz de Lieja”, ha manifestado Jan Jambon.

Lieja, una ciudad industrial cercana a la frontera alemana en la región de Valonia de habla francesa, también fue escenario de un tiroteo en el 2011, cuando un hombre armado mató a cuatro personas e hirió a más de 100 antes de dispararse.