La consejera de Seguridad Nacional estadounidense, Condoleezza Rice, prometió ayer al primer ministro palestino, Ahmed Qurei, que Washington hará todo lo posible para impedir que Israel lleve a cabo la demolición masiva de viviendas en la franja de Gaza, según declaró el ministro de Exteriores palestino, Nabil Shaat, al término del encuentro que Rice y Qurei celebraron en Berlín. "Los estadounidenses actuarán ahora para frenar lo que está pasando en Rafah", afirmó Shaat. Rice criticó en público las demoliciones, al afirmar que "algunas de sus acciones de los israelís no crean la mejor atmósfera".
La dirigente norteamericana instó, sin embargo, al primer ministro palestino a aprovechar "la oportunidad histórica" que constituye la propuesta del primer ministro israelí, Ariel Sharon, de una retirada unilateral de la franja de Gaza. "Creemos que no hay nada malo en acciones unilaterales que vayan en la buena dirección", señaló Rice.
Qurei, por su parte, afirmó que el repliegue sería bien recibido si se tratara de "una retirada organizada en el marco de la Hoja de ruta", el plan de paz elaborado por el Cuarteto (Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y la ONU).
