La innovación como motor de desarrollo. Esta es la solución, pero lo complicado está en llevarlo a la práctica. Para ello, Ejea acogió el 23 de enero la III Jornada Retos del Futuro, organizada por la Red Innpulso de Ciudades de la Ciencia y la Innovación, el Ayuntamiento de Ejea y la Agencia de Desarrollo de Ejea, Sofejea. La inauguración corrió a cargo de la alcaldesa de Ejea, Teresa Ladrero, quien reconoció que «en el medio rural estamos sometidos a grandes amenazas: el envejecimiento, la despoblación, el éxodo de los jóvenes, y jornadas como esta nos permiten reflexionar en la innovación como solución ineludible».

En la inauguración también estuvo presente el alcalde de Ermua, que ocupa actualmente la copresidencia de la Red Innpulso junto a Tarrasa. Juan Carlos Abascal señaló que «ciudades intermedias como Ermua, o como Ejea, tenemos que trabajar para buscar soluciones innovadoras para nuestros municipios que nos permitan seguir compitiendo».

La situación preocupa porque de los 731 pueblos que existen en Aragón, más de la mitad tienen menos de 500 habitantes, casi 200 localidades tienen menos de 200 habitantes, y en 15 de ellos, la media de edad es superior a los 65 años. Así que durante toda una mañana se pusieron sobre la mesa reflexiones como la necesidad de «la colaboración», punto al que se refirió Raúl Oliván , director general de Participación, Ciudadanía, Transparencia, Cooperación y Voluntariado del Gobierno de Aragón. En este sentido, Oliván destacó que «hay muchas ideas ahí fuera, solo hay que preguntar y la gente está dispuesta a colaborar». Se refirió también a la Agenda 2030, que «recoge 17 objetivos de desarrollo sostenible, algunos tan importantes como la gobernanza global y la igualdad». La cuestión es innovar «con el objetivo de permitir que cada generación viva mejor que la anterior». En este mismo sentido se manifestó Pedro Pardo, gerente de Unidad de Emprendedores del Instituto Aragonés de Fomento, quien destacó que «el talento está en la calle». En esta primera mesa redonda sobre La gobernanza de la innovación puso el ejemplo de que en Estados Unidos el 92% de la innovación surge de la población.

La mesa redonda también contó con el testimonio de Aurelio García, director de Escuela de Negocios del Pirineo. García, además de coincidir en que «la innovación se encuentra en el ADN de la ciudadanía» hizo hincapié en que «para resolver los problemas necesitamos buscar soluciones con otros ecosistemas, y por eso tiene sentido trabajar de la mano dentro de redes como Innpulso, que nos ayudan a aportar soluciones globales». Por su parte, José Carlos Arnal, director de la Fundación Parque Científico Tecnológico Aula Dei, destacó la necesidad de apoyar al «innovador» y de que los responsables políticos crean en él. «El que innova corre el riesgo de equivocarse, pero si no hay un reconocimiento detrás todo es muy desalentador». Pero la necesidad de este apoyo se justifica en que «es muy interesante que cada vez se está innovando más y hay que aprender de las nuevas oportunidades que surgen, ver lo que está funcionando en otros sectores y aprender a trabajar en esos entornos».

contra la despoblación

Uno de los grandes problemas que se pusieron sobre la mesa es la despoblación. Y como una de las soluciones a esta tendencia destaca la necesidad de «cambiar la mentalidad y saber que en los pueblos vivimos con más tiempo, más calidad medioambiental, tenemos una serie de recursos que queremos conservar, pero hace falta un cambio de mentalidad», según Pilar Pérez, presidenta de la Red Aragonesa Aragón Rural. Sobre esta tesis también se apoyó Joaquín Alcalde, gerente del proyecto de coworking El Hueco, de Soria, quien dijo que «la resolución del éxodo en el medio rural pasa por un cambio de mentalidad, de creernos que podemos vivir en los pueblos». Y es que hay municipios que a pesar de la financiación y los servicios, «siguen perdiendo población, así que el problema pasa por un cambio de paradigma mental en las personas que viven en el medio rural».

Ambos destacaron además la cooperación como una de las herramientas contra la despoblación. Precisamente, el coworking El Hueco es un espacio de 2.500 metros cuadrados desde donde se apoyan iniciativas de emprendimiento social relacionadas con la «repoblación» de la provincia de Soria. Uno de los proyectos en el que está implicado El Hueco es Terris, desde el que «100 expertos de distintos perfiles de toda España trabajan con un pensamiento innovador y disruptivo con el objetivo de cocrear la nueva ruralidad del siglo XXI», dijo Alcalde. Todo un reto.

El comisionado contra la Despoblación del Gobierno de Aragón, Javier Allué, presentó un panorama crítico al explicar que en Aragón unos 200 municipios tienen crecimiento negativo, donde no hay niños, ni mujeres en edad fértil, ni por supuesto emprendedores. «Para toda esa gente con el coraje de vivir en los pueblos, hay que seguir explorando nuevas ideas y nuevas posibilidades». Entre las fórmulas de trabajo planteadas se encuentra la de trabajar con la Red Innpulso, de la que forma parte Ejea. Las ideas que se vierten en esta red «pueden articularse sobre la base del sistema de delimitación comarcal de Aragón, apoyado sobre el fortalecimiento de los municipios cabecera de comarca como irradiadores de servicios y sostenibilidad al entorno rural en el que encuentran», remarcó Allué. De todas maneras, hay que tener en cuenta la localización, ya que «en España hay un gran desequilibrio en cuanto al emprendimiento y precisamente en los lugares despoblados es mucho más difícil innovar», según manifestó Luis Antonio Sáez, de la Cátedra sobre Despoblación y Creatividad de la DPZ.

La concejala de Economía del Ayuntamiento de Ejea, y consejera de Sofejea, Elena Guinda, fue la encargada de clausurar la jornada. Entre las conclusiones, la concejala destacó el importante papel de la mujer como solución a la despoblación. Y afirmó que «tenemos que dejarnos llevar por la innovación, romper ideas que nos limiten y seguir trabajando para dejar un mundo mejor a las generaciones venideras». T