La Comisión Provincial de Flujos Migratorios, que habitualmente se ocupa de coordinar las necesidades que surgen por la campaña agrícola en la provincia de Zaragoza, se reunió el pasado 9 de abril por videoconferencia a propuesta del Ayuntamiento de La Almunia, para dar respuesta a las muchas dudas que se plantean en el sector agrícola en esta situación de covid-19. Los ayuntamientos participantes (La Almunia, Ricla y Caspe) y las asociaciones de empresarios y agrarias plantearon dudas sobre mano de obra, contratación, movilidad, alojamientos, procesos de trabajo y sanidad.

Las instituciones allí representadas -Inaem, SEPE, Inspección de Trabajo, Salud Pública, fuerzas de seguridad, Extranjería, Cooperación al Desarrollo, sindicatos, etc. — se comprometieron a reflejar por escrito las respuestas que en esa reunión se dieron, de forma que se pudiese trasladar al sector en forma de instrucciones o recomendaciones que les permitan actuar con seguridad jurídica. Todo ello en el marco del recién aprobado Real Decreto Ley por el que se aprueban medidas urgentes de carácter temporal para favorecer el empleo agrario. La Comisión volvió a reunirse el 16 de abril para continuar avanzando en la coordinación.

La campaña agrícola en La Almunia se inicia a finales de abril, siendo mayo y junio los meses más intensivos en mano de obra. En el 2019 se superaron las 7.000 personas contratadas en Valdejalón, de las que la mayor parte lo son en Ricla y La Almunia. La complejidad radica en conseguir que se cubra en la mayor medida posible la demanda de personal necesario para la recogida de la fruta y, a la vez, cumplir las medidas de confinamiento, higiene y distancia social necesarias para combatir la pandemia de covid-19.

CENSO DE MANO DE OBRA

Durante la segunda reunión de la comisión, dedicada a la preparación de la campaña agrícola, los ayuntamientos de La Almunia y Ricla insistieron a las instituciones en la necesidad de que se dictasen instrucciones claras sobre las normas que debían cumplirse (transporte, alojamientos, contratación, etc).

Además se solicitó, tanto por los ayuntamientos como por las asociaciones empresariales, que se permita la contratación en origen para que puedan llegar los trabajadores fijos discontinuos desde Rumanía y otros países habituales. En el encuentro se dio como válido un documento orientativo de una guía de buenas prácticas en centros de trabajo, emitida por el Ministerio de Sanidad y procedimiento de servicios de prevención ajeno.

El subdelegado del gobierno solicitó que los municipios le proporcionasen en el plazo de una semana una estimación lo más precisa posible de las necesidades de mano de obra de las explotaciones. El objetivo era poder adoptar toda una serie de medidas dependiendo de dichos datos: habilitación de nuevos alojamientos, posible puesta en marcha de transporte hacia Ricla-La Almunia, refuerzos sanitarios, espacios para aislamiento de posibles positivos por covid-19, etc.

La Asociación de Empresarios de la Margen Derecha se encargó de tomar los datos de sus asociados. Por su parte, los consistorios de La Almunia y Ricla recogieron la información de aquellos empresarios agrícolas que no son socios de Aeamde.

BOLSAS DE TRABAJO

Para cubrir las necesidades de mano de obra se han confeccionado bolsas de trabajo donde podían inscribirse aquellas personas interesadas en trabajar en la campaña agrícola. Los ayuntamientos de La Almunia y Ricla no disponían de bolsa propia, pero los interesados podían inscribirse en el Inaem, o en las bolsas que prepararon ASAJA, ARAGA, UAGA y UPA a través de sus respectivas páginas webs. La Aeamde preparó también en su web una bolsa de empleo.

EN ÉPILA

También el Ayuntamiento de Épila comunicó la idoneidad de tener información sobre las necesidades de mano de obra de las explotaciones agrícolas de la localidad. En concreto se necesitaba saber cuántas personas necesitará cada explotación y, de ellas, con cuantas se contaba ya y qué número se tenía pendiente de localizar. También era necesario saber si se disponía de alojamiento para estos temporeros. El objetivo era realizar un censo y adoptar una serie de medidas con la información recogida de los empresarios agrícolas que no son socios de Aeamde. Para ello, se solicitó de los empresarios relacionados con la agricultura, que se pusieran en contacto con el ayuntamiento para realizar las comunicaciones oportunas al respecto; una información orientativa pero trascendental para preparar una campaña especialmente complicada. T