El Consejo de Gobierno ha aprobado destinar para la comarca del Campo de Borja una partida de 3.390.704 euros para obras de creación, mejora y modernización integral de sus regadíos. Las subvenciones irán destinadas a las localidades de Ainzón, Borja y Mallén.

La inversión más importante se dará en Ainzón, donde la Unión Europea y el Departamento de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón invertirán 3,1 millones de euros para la transformación de regadíos. En total, se van a crear en esta localidad 827 hectáreas de regadíos sociales, incluidos en el Plan Nacional de Regadíos Horizonte 2008.

Las obras comenzarán después del verano y tendrán un plazo de ejecución de 18 meses. Estas se realizarán por la administración a través de la empresa pública SIRASA (Sociedad de Infraestructuras Rurales Aragonesas SA).

El regadío social de Ainzón es el primero que se impulsa del total de 20.961 hectáreas incluidas en el Plan Nacional de Regadíos Horizonte 2008 y, además, de contar ya con financiación pública dispone también de concesión de agua por parte de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).

Modernización de regadíos

El Sindicato de Riegos de la Ciudad de Borja recibirá 99.962 euros para la canalización de varios tramos de acequias, unas mediante tubería de PVC y otras de hormigón. La subvención del Gobierno de Aragón supone el 40% del coste total de las obras. Este dinero se distribuirá entre este año y el próximo. Los 1.750 usuarios de esta comunidad se verán beneficiados por esa actuación.

En Mallén, la Comunidad de Regantes del Canal Imperial de Mallén-Novillas recibirá una ayuda de 99.881 euros que irán destinados a la canalización mediante hormigonado "in situ" y entubado de hormigón de varios tramos de acequias que suman un total de 1.700 metros lineales. La subvención se dividirá en dos partes iguales que se otorgarán este año y el próximo. Las obras tendrán su repercusión en una superficie de 820 hectáreas.

El consejero de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón, Gonzalo Arguilé, destacó "la importancia del regadío para esta zona agrícola" y resaltó el "gran esfuerzo" que se realiza tanto económico como medioambiental, puesto que estas actuaciones suponen un gran ahorro de agua y un mayor y mejor aprovechamiento de nuestros recursos hídricos. Asimismo, la modernización de las explotaciones de regadío de Aragón mejora las condiciones de vida de los regantes, ya que posibilitan eliminar turnos de riego nocturnos.