Sea o no consecuencia del cambio climático, lo que parece claro es que tampoco estas nevadas siberianas son normales, naturales, en España. Algo artificial, la mano del hombre con sus alquimias, químicas y energías atómicas está vulnerando las viejas leyes de la naturaleza, alterando el medio ambiente y el clima.

Otro de los intelectuales que se muestra plenamente convencido de nuestra nefasta responsabilidad es Jordi Serrallonga. A quien, un tanto frívolamente, lo han venido apodando el Indiana Jones español debido a su carácter aventurero y a sus arriesgadas experiencias junto a tribus primitivas, sobre todo en África, pero cuyo prestigio como arqueólogo y antropólogo queda fuera de duda y se demuestra una vez más en su último y reciente ensayo, 'Dioses con pies de barr'o.

Para Serrallonga, la obstinación de buena parte del 'establishment' por negar el cambio climático obedece a la incomodidad que les provoca la propia noción de cambio. La incertidumbre, arguye Serrallonga, no forja ni sustenta líderes de gobierno ni estructuras de poder. Respecto a la pandemia del SARS-CoV-2, a la que así, técnicamente, se refiere, advierte Serrallonga sobre el peligro de desoír la voz de los científicos y que una vez más vuelvan a quemarse en el altar de la ignorancia las fórmulas y descubrimientos de una Hipatia o de un Galileo. ¿Salvar la tierra? Sí, se pregunta el autor, pero ¿de quién? ¿Del propio hombre?

Por lo demás, dioses con pies de barro se lee con el placer de los mejores ensayos, aquellos que combinan la divulgación con la apuesta por nuevas ideas.

De la mano de Serrallonga volveremos a embarcarnos en el 'Beagle' para viajar en compañía de Darwin hasta las Islas Galápagos e intuir los misterios de la evolución en los sutiles cambios de los pinzones y de las iguanas. O bien, nos arrastraremos por la sabana africana procurando no desgarrarnos la piel con las espinas de los matorrales en pos del rastro de cualquiera de las presas que las tribus primitivas del norte de Kenya siguen cazando casi del mismo modo que cuando apareció el homo sapiens, hará trescientos mil años…

Una lectura formativa, estimulante y políticamente incorrecta. Que reúne, es decir, los elementos indispensables para formar y mover conciencias.