El sector del taxi en Zaragoza está inmerso en cambios por el nuevo reglamento y, además, tiene que amoldarse a la situación surgida tras el confinamiento. Ahora, se ha decidido que hasta finales de agosto trabajen cada semana la mitad de los vehículos, turnándose con el objetivo de que se reparta el escaso negocio que aún hay por la capital. Dicen que la falta de turistas y el menor ambiente que se vive en Zaragoza les está provocando una seria crisis económica. La medida, aún no siendo la mejor para muchos, es totalmente entendible por cuanto hay que dar un impulso al sector y esto puede dar aire. La próxima ampliación de plazas hasta nueve y la posibilidad de poder ofrecer un precio cerrado antes de iniciar un recorrido, ambas medidas contempladas en el nuevo reglamento, también son positivas para un sector que tiene que adaptarse a los nuevos tiempos y lo está haciendo a pasos agigantados