Lo único claro es que las Cortes van a crear una comisión de investigación para analizar la gestión de Plaza. Por lo demás y pese a la aparente unanimidad que los grupos han mostrado para ponerla en marcha, la tensión se ha apoderado de algunas de las formaciones, por los plazos, la temática e, incluso, el modelo que se debe seguir en dicha comisión. No todos los diputados del PSOE suscriben la decisión de su líder, Javier Lambán, de apoyar la iniciativa que partió de CHA e IU. El PP, por su parte, estudia la ampliación de los plazos para las conclusiones y la izquierda teme que pretendan acercarse a las elecciones del 2015 y rentabilizar los resultados. Y el PAR se lava las manos cuando era socio de Gobierno del PSOE en los años investigados. Poca voluntad se ve de ir al fondo de la cuestión política a investigar.