El pasado 12 de febrero, el Consejo de Gobierno de Aragón decidió dar un paso adelante para proteger y garantizar la vida de los ciudadanos, a través del decreto que regula el uso de desfibriladores externos (DEA) fuera del ámbito sanitario.

En general el decreto, reconoce la exigencia de instalar estos equipos técnicos en espacios de alto tránsito, como comercios de más de 25.000 habitantes, centros de ocio, deportivos y piscinas con aforo igual o superior a 300 personas, centros educativos, espacios de trabajo con más de 250 empleados, residencias de más de 200 plazas y hoteles con más de 100. Así como también en comercios de más de 2.500 m2, aeropuertos y estaciones de tren y autobuses dispuestas en las distintas poblaciones.

Asimismo, establece las normas para garantizar la presencia de personal capacitado, capaz de ofrecer un servicio cardioprotección, eficaz que contribuya a salvar vidas. Estableciendo los procedimientos indicados en caso de emergencias y situaciones de riesgo.

LA INCLUSIÓN DE LOS TÉCNICOS DE EMERGENCIAS SANITARIAS, UNA NOVEDAD DEL DECRETO

Según los datos aportados por Vicente Guillén consejero de Presidencia a los medios de comunicación, un elemento importante del decreto vigente, es la incorporación de un nuevo sector a los grupos autorizados para gestionar la utilización de los desfibriladores semiautomáticos y automáticos dispuestos en los espacios públicos. De esta manera, ahora se incluyen los Técnicos en Emergencias Sanitarias, además de los médicos, enfermeros y personas que habían recibido formación específica para el uso de DEA fuera del ámbito sanitario.

En el caso de las personas que no pertenezcan a los grupos autorizados y definidos en el decreto, será necesario para adquirir la acreditación, cursar el programa de formación facilitado por las entidades autorizadas en Aragón. El programa de formación necesario, está descrito de forma detallada en el decreto. Sin embargo en caso de emergencias, cualquier persona puede prestar la asistencia, siguiendo los pasos descritos por los servicios de emergencias, con independencia de la ubicación y de la propiedad o titularidad de los aparatos.

LA ACREDITACIÓN, UN ELEMENTO INDISPENSABLE PARA AUTORIZAR EL USO DE LOS DESFIBRILADORES

Según los parámetros expuestos en la sección denominada condiciones para la utilización de los desfibriladores externos del decreto, queda establecido que el personal no médico debe contar con una acreditación que autorice el uso del equipo, a excepción de un caso de emergencia. La acreditación, se obtiene después de la aprobación de los cursos de formación impartidos en los centros e instituciones autorizados para ello.

Una de las empresas que cuenta con aprobación para gestionar la formación es Desalife, una organización que cuenta con más de 8 años de experiencia, ofreciendo a los interesados cursos rcp y asistencia y asesoría para la construcción de espacios cardioprotegidos. Gracias a la calidad de sus servicios, ha logrado posicionarse como una opción importante para cardioproteger a las empresas en Aragón. Dentro de la lista de clientes que han decidido confiar en Desalife la responsabilidad de cardioproteger su empresa, destaca el Grupo San Valero de Aragón, (Universidad San Jorge, CPA, Seas Estudios Abiertos).

LA UBICACIÓN, UN TEMA CLAVE PARA PERMITIR DISPONIBILIDAD DE DESFIBRILADORES MÁS ALLÁ DEL ÁMBITO SANITARIO DE ARAGÓN

A los fines de garantizar la disponibilidad de desfibriladores en la mayor cantidad de lugares públicos, el decreto contempla que en el mapa autonómico de ubicación de desfibriladores fuera del ámbito sanitario de Aragón, se puedan incluir los equipos dependientes de los Ministerios de Defensa e Interior. Asimismo, establece la posibilidad de disponerlos en la vía pública o en lugares a la intemperie. En cuanto a la ubicación de desfibriladores en vehículos de transporte, el decreto considera pertinente la inclusión de los equipos en todos los medios de transporte públicos.

ELEMENTOS CLAVES DEL PROCESO LICITATORIO PARA EJECUTAR LA COMPRA DE DESFIBRILADORES EN ORGANISMOS DEL SECTOR PÚBLICO

Ante la exigencia que recoge el decreto, se hace inminente la adquisición de desfibriladores por parte de las instituciones y organismos del sector público. En este sentido, el Gobierno de Aragón notificó la proximidad de un proceso licitatorio que tendrá como objetivo seleccionar las empresas que realizarán el suministro de los equipos. El procedimiento además servirá para definir claramente las especificaciones técnicas, que deberán cumplir los proveedores que deseen participar.

Las empresas que decidan ofertar en la licitación, además de cumplir con el marco legal y técnico exigido, deberán contar con la autorización para impartir capacitación al personal de las instituciones. Esto con la misión de lograr acreditar a las personas que estarán encargadas de manipular los desfibriladores, dispuestos en los diferentes organismos. Dentro de los parámetros de evaluación y calificación que servirán para elegir a las empresas adjudicadas para proveer los equipos y la capacitación, serán considerados, el precio del alquiler mensual del equipo en las modalidades previstas, así como de la formación inicial y continuada, individual o por grupos.