-¿Cómo está?

-He pasado una semana un poco dura porque no he podido jugar pero ya estoy bien. Es una lesión que llevo arrastrando varios meses pero creo que ya la hemos podido curar bien.

-¿Estará disponible mañana?

-Hoy (por ayer) ya he podido hacer el entrenamiento normal y bien, contento, con buenas sensaciones. Yo estoy disponible, si el entrenador quiere contar conmigo, estoy dispuesto.

-¿Cómo afrontan ese partido ante el Extremadura?

-Es una final. Nos jugamos mucho después de la derrota del otro día y tal y como se ha puesto la clasificación y vamos a dar lo mejor de nosotros. Estoy seguro de que va a ser complicado pero que lo vamos a sacar.

-No esperaban esta situación, claro.

-Cuando empieza la Liga todos los equipos partimos de cero y conforme pasa la temporada es cierto que no esperábamos estar aquí pero la realidad es la que es, ahora estamos aquí y tenemos que intentar salir como sea.

-Les espera un partido complicado, el Extremadura está inmerso en una gran reacción.

-Es un rival directo y ha ganado los últimos cinco partidos, está en un momento de euforia, vamos a intentar calmarles un poco los ánimos.

-¿Y los suyos? ¿Hay temor, preocupación por la clasificación?

-Sí, claro, preocupación sí que hay, pero sabemos dónde estamos y somos conscientes de ello. A partir de ahí sabemos lo que tenemos que hacer y estoy seguro de que vamos a sacar un buen resultado en casa del Extremadura.

-¿En el vestuario se habla mucho de la situación?

-Se piensa en ganar cada partido. Si ganamos el sábado daremos un gran paso en nuestras aspiraciones.

-La plantilla está llena de canteranos. ¿Ustedes lo sufren más o de otra manera?

-Creo que sufrimos todos por igual. Los de aquí hemos visto otras cosas, yo conocí al Zaragoza de pequeño, en otra época, en Primera División y en los puestos de arriba, pero esta es la realidad y no hay otra. Pero aquí estamos todos a una, cuando sales al campo da igual que seas canterano o no, luchamos por la misma camiseta y por el mismo objetivo.

-¿Por qué cree que ha sido una temporada tan irregular?

-Para mí la verdad es que ha sido una temporada muy complicada, me han pasado un montón de cosas que no me esperaba yo que eran así, me van a servir para aprender para el futuro. Igual nos ha faltado una pizca de suerte que a veces hace falta en partidos clave. Perder o que te empaten en el último minuto es muy duro. Pero esto nos va a servir para aprender y mejorar.

-Por ejemplo, el último partido contra el Deportivo.

-A veces hacemos muchas ocasiones y nos ha faltado esa puntería de cara al gol y los rivales te llegan una o dos veces y te vas con esa cara de qué ha pasado aquí.

-¿Qué piensa un zaragocista como usted cuando le dicen que le va a entrenar Víctor Fernández?

-Te impresiona porque ha sido un referente y que ahora sea tu entrenador pues te impresiona. Y a la vez te invita a trabajar duro. Para mí y para todo el zaragocismo es un referente.

-Con su llegada reaccionó el equipo, pero no se ha prolongado.

-Cuando llegó nos transmitió sus ideas y los primeros meses creo que las cogimos muy bien y llegaron los resultados. Pero después otra vez se nos volvieron a poner las cosas en contra y tenemos que sacarlo entre todos.

-¿Hasta qué punto han influido tantas lesiones?

-Las lesiones forman parte del fútbol. A veces cuando menos te lo esperas te lesionas, pero todos estamos expuestos. Ha habido muchas pero son cosas que pasan. Intentamos recuperarnos lo antes posible para ayudar al equipo.

-El Zaragoza crea ocasiones pero le cuesta meter gol, y le marcan con cierta facilidad.

-El que te hagan goles y hacerlos no es solo es parte de la defensa o de la delantera. Cuando nos marcan goles es por mil cosas, porque los del centro del campo no presionan bien, o los delanteros no presionan bien o los defensas no defienden bien, pero que no te hagan goles es algo de todo el equipo. El fútbol es un deporte colectivo. A otros niveles, en la Champions por ejemplo, puede haber jugadores puntuales que te ganan partidos pero esto es un juego colectivo.

-¿Cómo está siendo su primera temporada como profesional?

-Al principio de la temporada no me esperaba para nada estar donde estoy ahora. Es cierto que ha sido muy duro porque he tenido tres entrenadores en una temporada, cosa que nunca me había pasado. Hasta ahora había tenido un entrenador por año. Y muchas experiencias, aprendiendo. Estamos en una situación que no sabía cómo era esto, no sabía cómo era el fútbol profesional porque desde fuera se ve muy distinto. Yo he intentado dar lo mejor de mí cada vez que he podido.

-¿Cómo vive un jugador tres cambios de entrenador?

-He intentado aprender de cada uno de ellos, ver el lado bueno de cada uno, y a partir de ahí cada vez que llegaba un entrenador era como ver la luz de nuevo porque significaba una nueva oportunidad de ganarnos el puesto porque el que llega quiere ver cosas nuevas y cada uno intenta dar lo mejor de sí.

-En pretemporada usted fue una de las sorpresas, todo el mundo hablaba de Alberto Soro. ¿Cómo lo vivió?

-Te llegan esas cosas pero bueno, porque eres un chico joven y solo unos pocos zaragocistas me habían visto jugar en la Ciudad Deportiva. Yo solo intenté jugar como lo había hecho todos estos años atrás. Creo que tuve la suerte de marcar goles, que al final para los que jugamos arriba es primordial. Me acompañó la suerte y pude quedarme aquí y convertirme en profesional.

-Sin embargo cuando empezó la Liga no jugó tanto como cabía esperar. ¿Le sorprendió?

-No, no me esperaba jugar más. Intentaba dar lo mejor de mí en cada entrenamiento y luego era el entrenador el que decidía. Obviamente yo era un chico que estaba en una nube, por así decirlo, y no me iba a sentar mal no jugar o que no contaran conmigo. Solo ir convocado ya era un privilegio para mí.

-¿Ha tenido que adaptar su juego a la categoría?

-Es muy diferente, los rivales, la intensidad, los duelos individuales sí que hay mucha diferencia. Es fútbol profesional y estaba acostumbrado al fútbol base. Yo y todos los que llegan a profesionales se tienen que adaptar. Es una categoría muy física, te encuentras con gente que lleva muchos años y que sabe lo que hace.

-¿Posición preferida?

-Lo importante para mí es jugar y hacerlo lo mejor posible. Creo que a veces partiendo desde la banda y por el medio me encuentro bastante bien.

-¿Cómo es marcar un gol con el Real Zaragoza?

-Al principio no me lo creía y luego mucha ilusión, se me pasaron muchas cosas por la cabeza, me acordé de mucha gente. Me queda esa espinita de no haber marcado aún en La Romareda, pero espero que sea pronto.

-¿La gente le conoce y le para por la calle?

-Sí, últimamente más, tienes que mirar dónde vas, a qué horas estás por ahí. Es cierto que el descanso y la alimentación, tener cabeza, por así decirlo, es importante. Sí me paran. Tampoco me gusta mucho porque soy muy vergonzoso, pero me piden fotos y me dan ánimos.

-¿Cuál fue la primera vez que estuvo en La Romareda?

-Tendría siete u ocho años. Nací en Ejea pero con ocho o nueve años me fichó el Zaragoza y he estado toda la vida aquí. Al principio venía desde Ejea pero luego ya me quedé a vivir aquí. Esta es mi casa, por aquí han pasado grandes jugadores y este es un club de referencia en España.

-¿Conocía a Zapater antes de venir al club?

-Lo tenía como un referente. Cuando era pequeño todo el mundo hablaba de Zapater en el pueblo y cuando fui más mayor ya lo conocí personalmente. Intento reflejarme en él tanto dentro del campo como fuera.

-Está en la agenda de varios clubs. ¿Le llegan esas noticias?

-Yo estoy tranquilo. Se hablan un montón de cosas no solo de mí sino de muchos jugadores. Intento jugar lo mejor posible y a partir de ahí siempre he dicho que soy de aquí y he crecido aquí.

-¿Se ve muchos años en el Zaragoza?

-Sí, por supuesto.

-¿Con qué sueña?

-Con jugar en el Real Zaragoza en Primera División. Este club por entidad, por afición, siempre ha sido de Primera. Ahora no estamos pasando por un buen momento pero pronto volveremos. Ojalá pronto podamos celebrar el ascenso.