La presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica, Montserrat Comas, propuso ayer introducir en el Código Penal un nuevo agravante: el que hace referencia a los "motivos machistas". Este se sumaría a los que ya existen: cometer un crimen por razones racistas, antisemitas o por discriminación por la ideología, religión, raza u orientación sexual de la víctima.

Comas, miembro del sector progresista del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), realizó esta propuesta en la comisión del Congreso de los Diputados que estudia la futura ley antimaltrato. La norma, como está redactada ahora, dictamina que las amenazas y las coacciones leves son delitos (y no faltas) si las comete un hombre sobre su compañera o ex , pero no si la mujer es la agresora. Respecto al delito de lesiones, la ley considera un agravante el hecho de que el agresor --siempre es un hombre, según la ley-- sea el compañero sentimental de la víctima.

Comas, al contrario que los jueces del sector conservador del CGPJ, calificó de constitucional el actual redactado de la ley respecto de las penas. Sin embargo, explicó que introducir un nuevo agravante --el de motivos machistas-- es mejor. Por último, Comas propuso la creación de centros para impartir cursos de reinserción social a los maltratadores que no ingresen en prisión.

Tras la intervención de Comas, le tocó el turno a Enrique López, portavoz del CGPJ y miembro del ala conservadora. López criticó la ley antimaltrato porque, a su juicio, "deja fuera a otros colectivos, como niños y ancianos".

El portavoz del CGPJ admitió la posibilidad de introducir en la ley agravantes. Sin embargo, al contrario que Comas, López insistió en que estos agravantes deben ser por abuso de autoridad cuando ésta venga determinada por el sexo. Esta posibilidad contemplaría, por ejemplo, el asesinato de un hombre a su novia, pero también el de un hombre a una prostituta.