El pasado fin de semana murieron 38 personas en 33 accidentes de tráfico ocurridos en las carreteras de España. De ellas, 13 tenían entre 16 y 29 años. Además, entre las tres de la tarde del pasado viernes y la medianoche del domingo otras 39 personas sufrieron heridas graves y 56, heridas leves. En concreto, el viernes hubo 12 fallecidos en nueve accidentes con 13 heridos graves y 11 leves, mientras que el sábado se contabilizaron catorce siniestros con 15 víctimas mortales, 17 heridos graves y 30 leves. Y durante la jornada del domingo se constataron 11 víctimas mortales, 9 heridos graves y 15 leves.
La Dirección General de Tráfico (DGT) prevé cerca de 400.000 desplazamientos en las carreteras aragonesas durante la operación Fin de agosto-2004, aunque el flujo de retorno por carretera se lleva realizando de forma escalonada desde el pasado fin de semana. Los técnicos de tráfico estiman que los horarios más desfavorables para la circulación serán los comprendidos entre las 09.00 y las 22.00 horas. Como es habitual en estos casos, las Jefaturas Superiores Provinciales de Tráfico de Zaragoza, Huesca y Teruel van a poner en marcha un dispositivo especial para tratar de lograr la mayor seguridad y fluidez posibles en la red viaria. En Aragón, los tramos más conflictivos para la circulación son la Ronda Norte de la A-2 (en sus accesos y salidas a Zaragoza); la travesía de la N-232 por El Burgo de Ebro (Zaragoza); la travesía de la N-330 por María de Huerva (Zaragoza); la travesía de la N-240 por Monzón (Huesca); el acceso y fin de la Autovía A-23 en Santa Eulalia (Teruel) y el tramo de la N-234 en San Agustín (Teruel) ya en el límite con la provincia de Castellón. Además, la Dirección General de Tráfico informa que se suspenderán las obras en carreteras que afecten a la plataforma de circulación de las vías y que las actuaciones que se estén ejecutando permanecerán debidamente señalizadas. Según la DGT, el retorno de vacaciones del mes de agosto es el "más importante" en cuanto al número de desplazamientos de todo el período estival, lo que originará un fuerte movimiento de vehículos por todas la carreteras aragonesas y españolas.
