Juan José Ibarretxe aprovechó la conferencia de presidentes autonómicos para manifestar "su respeto" hacia la reforma del Estatuto de Cataluña y hacia otras reformas y exigir "idéntico respeto" a sus planteamientos y a las decisiones del Parlamento de Vitoria y la "nación vasca".

Consciente de que su presencia en la primera conferencia de presidentes en 25 años de Estado de las autonomías era la gran novedad e iba a ser aprovechada por algunos barones como el extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra y la madrileña Esperanza Aguirre para descalificar su plan soberanista, el lendakari evitó entrar en polémica. Se limitó a pedir "respeto" y a decir que, entre presidentes del PSOE y del PP, su papel fue "dar una visión diferente de un Estado en el que hay diversas naciones y regiones".

Sobre la continuidad y los resultados de la conferencia se limitó a decir que "el apetito viene comiendo" y que todas las iniciativas colocadas en la agenda serán válidas en la medida en que puedan ser activadas. "El futuro dirá si la conferencia es un instrumento válido".

Ibarretxe justificó su presencia diciendo que "hay que hablar con todos y de todo" y previno que "el diálogo multilateral" en ningún caso puede sustituir el "diálogo bilateral Euskadi-España". Abogó, eso sí, por "impulsar con energía" las relaciones bilaterales y multilaterales y confesó que uno de sus grandes objetivos como lendakari "es alcanzar una relación amable entre España y Euskadi". "No es posible un proyecto de Estado en común si no se respeta la voluntad de las partes, a las naciones sin Estado y a las regiones que lo componemos", concluyó.

También reclamó el reconocimiento de las naciones sin Estado en la Constitución europea, su presencia en los consejos, su acceso directo al Tribunal Europeo, circunscripciones autonómicas al Parlamento europeo y el reconocimiento de las lenguas oficiales.

DIALOGO BILATERAL El lendakari, que ocupó un lugar preferente a la derecha de Zapatero, no perdió oportunidad de mantener el primer diálogo bilateral con él. Los tres minutos que la organización concedió a los reporteros gráficos para que inmortalizaran la reunión, los empleó Ibarretxe en explicar a Zapatero sus planteamientos políticos y electorales.