Objetivo cumplido. Es el mensaje que coincidieron en transmitir ayer todos los partidos, que pocos más actos han podido hacer, en general, en tan escueta campaña, con temas parecidos aunque con recetas distintas. El optimismo reina de cara a la galería, entre los que a priori tienen mejores perspectivas, como el PSOE, el PP y, en cierta forma, Vox, y también entre los que están algo en el alamabre, como Unidas Podemos, o les vienen mal dadas en los sondeos, como a Ciudadanos, Más País-CHA-Equo o Teruel Existe. Ahora les toca cruzar los dedos y confiar en que su mensaje haya calado entre unos votantes por lo general cansados de serlo.
PSOE / Desbloqueo sin perder derechos
El PSOE reiteró ayer la idea de que son los únicos capaces de sacar al país del «bloqueo» político en el que, según su visión, lo tienen sumido la derecha, por no abstenerse, y la izquierda de Unidas Podemos, por sus excesivas exigencias para forjar un Gobierno de coalición. La cabeza de lista por Zaragoza al Congreso, Susana Sumelzo, defendió ayer que han llevado a cabo una campaña «positiva y limpia», frente a las «mentiras y ataques injustificados» de otros, detallando el «contrato con los ciudadanos» que es su programa electoral. Un documento en el que destacan medidas como la creación de un ministerio específico contra la despoblación, un nuevo estatuto de los trabajadores que derogue las medidas más perniciosas de la reforma laboral del PP -como el abaratamiento de los despidos o la precarización del empleo- o una transición ecológica que no se olvide del empleo en la implantación de las energías renovables.
Los socialistas guardaron una última bala, tras el desfile de ministros, en forma de visita del secretario general de los socialistas valencianos, Ximo Puig, a Teruel. En sintonía con el aragonés Javier Lambán, Puig alertó de que en las elecciones de mañana están en juego cosas muy importantes, como «la legitimación de lo que han sido las reglas de convivencia» y cuestiones «tan básicas como la igualdad, los derechos y las libertades», ante el avance de la extrema derecha.
PP / Desbloqueo y unidad de voto
El Partido Popular también se arroga el papel de ser la única fuerza capaz de desbloquear la situación política. Para ello, como insistió el presidente de la formación, Pablo Casado, en su mitin en Zaragoza, tienen que concentrar el voto de la derecha, algo que ven complicado con el auge demoscópico de Vox. El número uno al Congreso por Zaragoza, Eloy Suárez, insistió ayer en que el voto «patriótico» es al PP.
Contó con el apoyo de la número dos de la lista por Madrid, la expresidenta del Congreso Ana Pastor, porque los populares también se guardaron una última carta con ella, antes del cierre de campaña en su sede. Pastor visitó a representantes del clúster de la automoción. La visita sirvió para poner como ejemplo de la mala gestión socialista los anuncios de la ministra de Transición Ecológica sobre el fin del diésel.
La candidata sintetizó lo que ha venido siendo la propuesta popular: tomar medidas contundentes en Cataluña, frente a un Gobierno en funciones desbordado y «melifluo» y bajar impuestos para incentivar la economía y el empleo ante la crisis próxima.
Ciudadanos / Un voto centrado que vale triple
Ciudadanos confía en que mañana la realidad desmienta a los sondeos que auguran una fuerte bajada del partido respecto al pasado 28 de abril. Rodrigo Gómez afirmó ayer, en el cierre de campaña previo al viaje de todos los candidatos a Barcelona, que «la remontada es posible», y que el voto de los «moderados» que se movilicen mañana en favor de Ciudadanos valdrá «triple», porque servirá para desbloquear el Gobierno, ayudará a que este «no dependa de los nacionalismos» y contribuirá a afrontar las «grandes reformas» que necesita España. El portavoz de la formación en Aragón, Daniel Pérez Calvo, apoyó la movilización porque «no nos puede dar igual que España quede en manos de quienes quieren destruir nuestro modelo de estado o que haya un gobierno débil chantajeado en todo momento».
Podemos / Impuestos para los más ricos
Si algo ha diferenciado la campaña de Unidas Podemos es la contundencia a la hora de sostener que las medidas sociales y económicas que quieren impulsar, que no distan mucho de las del PSOE o Más País, las van a financiar vía impuestos a los más ricos, bien sea «la banca, las grandes corporaciones y las grandes fortunas», como reiteró ayer el número uno de la lista al Congreso por Zaragoza, Pablo Echenique. Así se subiría el salario mínimo, se garantizarían los servicios públicos y se activaría la economía.
La formación contó ayer en Zaragoza con la visita del fundador de Podemos Juan Carlos Monedero, que a base de chascarrillos insistió en lo «altanero y mentiroso» que es Pedro Sánchez y lo difícil que será combatir a los «poderes» del país sin un Podemos «fuerte». Echenique consideró de hecho que solo el voto a la coalición garantizará «un país más justo y mejor».
Vox / Todo irá bien sin autonomías
Vox cerró ayer en Huesca la campaña electoral, que ha pivotado en gran medida en torno a una de las ideas centrales del partido, la erradicación de las comunidades autónomas. Para los ultraderechistas, que salvo en las intervenciones de su líder nacional han rebajado el tono sobre la inmigración y la violencia de género, esto conseguiría a la vez no discriminar a unos territorios respecto a otros, clave para ellos en el conflicto catalán, y se ahorraría un gran gasto que revertiría en infraestructuras. Lo que compensaría la masiva bajada de impuestos que propugnan.
El candidato al Congreso por Zaragoza, el madrileño Pedro Fernández, confió ayer en que se cumplan las encuestas que les dan como tercera fuerza, ante un momento «crucial» para España.
Más País / La alternativa de la «ilusión»
Más País-CHA-Equo cerró campaña situándose como la fuerza contraria a Vox, y el catalizador necesario para que se conforme un Gobierno progresista. El cabeza de lista al Congreso por Zaragoza, Carmelo Asensio, insistió en que su presencia en el Congreso conseguirá llevar la «agenda aragonesa» a Madrid, con infraestructuras y lucha contra la despoblación, y una financiación adecuada para lograrlo. Sin su presencia, insisten en la formación, la comunidad es olvidada en la política nacional.
