El Ebro continúa estable en su tramo final, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), y las distintas poblaciones situadas en sus márgenes esperan que los diferentes embalses contengan las posibles inundaciones.

Según la CHE, el Ebro a su paso por la estación de aforo de Ascó (Tarragona) mantiene un caudal de 1.559 metros cúbicos por segundo, mientras que en la de Tortosa (Tarragona) es de 1.561 metros cúbicos por segundo.

En cuanto al nivel de los pantanos, Mequinenza, el mayor del sistema de embalses del tramo final y sobre el que se centran las esperanzas de absorber todo el volumen de agua que ha pasado por Navarra y Aragón, se encuentra al 94,94 % de su capacidad, mientras que el de Ribarroja de Ebro está en el 98,19 %.

El ritmo de subida del nivel de los pantanos es de entre el 1,1 y el 8 % cada 6 horas. Según la CHE, los caudales seguirán elevados los próximos días, al menos hasta el domingo, "aunque no se prevén incidencias ni desbordamientos, ya que los desembalses permitirán absorber las aportaciones de agua que deben llegar", según informaron fuentes de Protección Civil.

Mora de Ebro, Benifallet y Miravet son los pueblos con más posibilidades de tener afectaciones si el caudal aumenta y, en el caso de Miravet, ya hace días que se han quitado los motores que bombean agua de los pozos y se han inundado entre 3 y 4 hectáreas en zonas muy bajas. "En Miravet, con 1.800 metros cúbicos por segundo, entra el agua en algunas fincas, se impide el acceso a la carretera por el paso de barca y se deberían desalojar bares y comercios en la parte mas baja", apuntó el alcalde del municipio, Toni Borrell.

Protección Civil recomienda limitar las actividades de ocio y profesionales por los caudales que se puedan alcanzar.