Que un establecimiento se ubique en plena naturaleza, supone un ligero problema, pues normalmente hay que conducir de vuelta. Sin embargo, ese problema desaparece en la Hospedería El Batán, que haciendo honor a su nombre ofrece magníficas habitaciones, cercanas al comedor. Unas instalaciones que han ido creciendo poco a poco, convirtiéndolo en el destino ideal para una escapada, por más que los fines de semana hasta casi finales del próximo año están ya reservados.

Integradas en el edificio principal, o diseminadas por el entorno, las habitaciones son espaciosas y cómodas, con toda suerte de servicios, incluida una pequeña terraza. A lo que hay que sumar la excelencia del desayuno, diseñado como bufé que incluye platos salados como un revuelto con trufa, salchichas caseras, además de numerosos productos de la tierra. Sale el cliente con el paladar más que satisfecho y con energía para reanudar el viaje.

Una colación a la altura de la cocina del restaurante, que continúa con su sólida progresión, aliando productos turolenses –singulares muchos de ellos– con las más idóneas técnicas de cocina para cada elaboración. Su enumeración ya da idea de lo que espera al cliente: Repostería salada: Chip bacalao, crema queso y trufa, Helado de salmorejo en cornete; Taco de pollo de corral al chilindrón. Frutas y mar: Atún blue finn, pera de invierno, wassabi suave; Perla negra y espuma de pepino-lima. Huerto y corral: Borraja con carbonara trufada; Espinacas, yema ecológica y trufa. Bosque y montaña: El monte en la urna; Crema- fondue de trufa, boletus y trompetas: Mar: Lubina salvaje, crema de coliflor y legumbres de cuaresma. Campo: Wagyu mudéjar a la llama; Lomo de ciervo, puré trufado y encurtidos. De la leche: Quesos y texturas. Calanda: Texturas de melocotón. Chocolate y avellanas. Texturas en teja. Y Dulces del Batán.

Un matizado recorrido de sensaciones, bien compensadas, que sorprende en cada pase, pues las elaboraciones están perfectamente pensadas para generar sabores. Que los hay, y muchos en la cercanía, sea la trufa, la variedad de quesos, las hortalizas, los huevos ecológicos, el ciervo e, incluso, la carne wagyu.

Todo ello, además, con una magnífica relación calidad-precio, que justifica de largo el viaje. 

Hospedería El Batán. Ctra. Comarcal 1512, km. 46. Tramacastilla de Albarracín. 978 706 070. No cierra. Precio medio a la carta: 65 euros Menú degustación: 74 euros. Habitación doble, desde 85 euros. Alojamiento y media pensión, dos personas, desde 179 euros. Admite reservas. Admite tarjetas. Buen acceso discapacitados.