ESPECTACULOS

Opiniones distintas

***Jesús Gimeno

***Zaragoza

En el periódico del pasado sábado día 15, en la sección cartas al director, se publicó una carta del señor Mariano Chueca con el título "¿Y la música?", en la que afirma ser compositor y tener "envidia" de los actores, por el activo posicionamiento de éstos contra la guerra, que no ha visto por regla general en los músicos. Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, critica algo veladamente, como siempre, el fenómeno Operación Triunfo. En parte comparto la opinión de este señor, pero no entiendo que se aproveche para meter dentro del saco de una supuesta cultura "pepera" el fenómeno O.T. y a los cantantes-artistas salidos de dicho programa.

Si algún cantante de los que podemos llamar "de moda", precisamente de esos salidos de O.T., se ha manifestado en público contra la guerra (y en otras ocasiones, como por ejemplo, por el caso Prestige ), ha sido precisamente David Bustamante, que en una reciente rueda de prensa en Valladolid (pasado día 7) dijo algo así (ahora no puedo reproducir sus palabras exactas): que el gobierno tiene que escuchar al pueblo, y que él también quería decir NO A LA GUERRA. Por tanto, también entre los cantantes y entre los artistas que han sido conocidos gracias a ese denostado programa hay gente comprometida.

GUERRA

No se vaya, sr. Aznar

***Miguel Angel Bellido

***Zaragoza

No se vaya, señor Aznar, pero recapacite, sobre el 15 de febrero, sobre el clamor popular. ¿Le suena esa palabra, popular? Sí, exacto, es el nombre de su partido.

No se vaya, señor Aznar, pero escuche. Salga a la calle, no se encierre en su palacio, es confortable, ¿verdad? Tras sus muros no se oye nada, pero es un silencio de tumba, mausoleo donde se pudre la prepotencia.

No se vaya, señor Aznar, pero cambie de actitud. Respete al discrepante, no llame víctimas de la manipulación a los que siguen el dictado de la propia conciencia. Llame ingenuos a los que creen que con sus voces pueden cambiar el rumbo de los vientos de guerra, pero no los tome por tontos, inmaduros o borregos. No están locos, saben lo que quieren.

No se vaya, señor Aznar, sea fuerte con los dictadores y con los terroristas. Séalo con armas legales... y legítimas, junto a los organismos e instituciones para ello creadas, pero no sea fuerte con los débiles y débil con los fuertes. No sea halcón, sea paloma, o gaviota.

No se vaya, señor Aznar, sea ecuánime, no tergiverse, no llame antiamericanos a los que abominan de la política de Bush y su servidumbre a ella. No se confunda, llámelos antiimperialistas, si lo desea.

No se vaya, señor Aznar, sea usted católico, apostólico y romano si quiere, pero sea consecuente, siga el dictado espiritual de su sumo pontífice, que, como es lógico, aboga por la paz.

No se vaya, señor Aznar, pero no hipoteque nuestro futuro. No nos venda seguridad falsa a cambio de sangre inocente. No regatee petróleo a cambio de dignidad humana, no nos dé pan y vítores de guerra para hoy y hambre y llanto para mañana.

No se vaya, señor Aznar, pero gobierne para su pueblo, para los que le votaron, para todos los demás. Para los que depositaron en usted la confianza, para los que no tuvieron otro remedio que aceptarlo, para quienes le pagan, en suma.

En democracia no caben caudillos, ni iluminados, ni salvadores de patrias. Usted es un asalariado y la voluntad de la gente es clara. No espere a las urnas para comprobarlo.

ACLARACION

La sección De lunes a viernes del suplemento Cuadernos del domingo aparece sin firmar por un error técnico. El autor de la página es José Luis Trasobares.