Hoy hace un año que el Real Zaragoza entró en la actual Copa de la UEFA y no sólo el equipo, sino toda la ciudad quiere festejar el aniversario con otro éxito deportivo. El equipo de Alfonso Soláns ganó hace un año en Barcelona la Copa del Rey al Real Madrid que le dio acceso a la competición europea y la ciudad estalló en una fiesta. De la misma manera que la capital vibró en aquél momento --como lo ha hecho en otras muchas ocasiones históricas--, hoy los zaragozanos, vayan o no a La Romareda a ver el partido frente al Austria de Viena, tienen depositadas todas las ilusiones en los colores zaragocistas. Las banderas que lucen los autobuses urbanos desde ayer --en un bonito gesto de la sociedad y de TUZSA-- son la nota de color de un espíritu que la ciudad necesitaba. Ahora hace falta que los jugadores redondeen la faena iniciada en Viena para acrecentar así la ilusión por conquistar la UEFA. Ya sólo esta ilusión es un gran triunfo.