En contra de lo que muchos conductores puedan pensar, Zaragoza sólo registra atascos de tráfico ocasionales y nunca exceden de los quince minutos. Lo dicen los responsables de la Policía Local, que aunque reconocen que el tráfico en la ciudad es muchas veces lento y pesado aseguran que en raras ocasiones llega al colapso. Curiosamente, los dos puntos que registran mayores retenciones son las nuevas rotondas, la de la MAZ y la de Delicias. Ninguna de las dos cumple el objetivo para el que fueron construidas, por lo que lejos de solucionar el tráfico se han convertido en una trampa que rompe todos los esquemas en horas punta.