La Guardia Civil quiere reforzar la seguridad ciudadana en el medio rural con agentes en prácticas. En el caso concreto de Aragón, destinará un total de 209 becarios a las tres provincias de la comunidad. La medida eleva el nivel de efectivos en zonas que lo necesitan y ofrece la posibilidad de que los alumnos puedan formarse para pasar a formar parte de la benemérita en el corto plazo. Sin embargo, la decisión del Ministerio del Interior también revela que la plantilla de la Guardia Civil está infradotada en algunas zonas de España, algo que denuncian las asociaciones profesionales, que califican de «parches» este tipo de medidas.
Por otro lado, tal y como avanzó este diario hace solo unos días, también se va a poner en marcha un sistema de cita previa para interponer denuncias como alternativa al déficit de plantilla de la Guardia Civil en la provincia de Teruel. De esta forma, los vecinos de Alcañiz, Alcorisa, Mas de las Matas, Calanda y del resto de localidades cubiertas por estos cuarteles, tendrán que acceder a la página web de la benemérita y pedir turno para ser atendidos si quieren interponer una denuncia penal o administrativa o realizar cualquier trámite no urgente.
El debate sobre la falta de efectivos en el medio rural para garantizar la seguridad ha sido habitual en los años y se acentuó con episodios como los asesinatos de Igor el Ruso en Andorra y la búsqueda del Rambo de Requena en la provincia. Faltan efectivos y sobran ideas peregrinas. Esa es la realidad.