Real Zaragoza

Futbolistas bajo el foco

La crisis señala a unos jugadores alejados de una versión aceptable 

Contadas excepciones, como Francés, al suspenso generalizado

Francés disputa un balón, el pasado sábado, con Escriche.

Francés disputa un balón, el pasado sábado, con Escriche. / CARLOS GIL-ROIG

Jorge Oto

Jorge Oto

La galopante crisis en la que se ha instalado el Real Zaragoza, cambio de entrenador incluido, desvía el foco hacia unos futbolistas muy alejados, en su gran mayoría, de una versión aceptable. Salvo contadas excepciones, el rendimiento individual de los jugadores se sitúa muy por debajo de lo que han venido mostrando a lo largo de sus respectivas trayectorias. El suspenso es generalizado y afecta a la práctica totalidad de un plantel que en verano parecía a la altura de los mejores y que ahora acapara dudas por insolvencia.

El problema es colectivo y muy pocos escapan. Uno de ellos es, seguramente, Alejandro Francés. El canterano, aun sin brillar, es una de las pocas luces que se vislumbran entre tanta oscuridad. El central fue de lo poco que se salvó del raquítico Zaragoza que sucumbió el sábado ante un Albacete superior que mereció una victoria que no materializó hasta el minuto 89.

Francés, al que Velázquez reclutó en su debut a pesar de llegar de su periplo con la selección española sub-21 (Escribá siempre lo había dejado en el banquillo el primer encuentro tras su regreso) , fue el que menos errores cometió, el que más duelos ganó en defensa y el que transmitió mayor sensación de solvencia en una zaga que, de nuevo, volvió a fallar. Y es ahí donde emerge Jair, su compañero habitual en el centro, preso del que es, seguramente, uno de sus peores momentos desde que llegó al Real Zaragoza.

A la derecha, Fran Gámez también está demasiado alejado de una buena versión. Retratado en el gol de la victoria local, el valenciano, recién incorporado tras su lesión, también está completando una mala campaña marcada por la irregularidad y la incapacidad para abrochar un puesto que parecía haberle arrebatado Andrés Borge. La polivalencia del canterano, sin embargo, le aboca ahora a un lateral zurdo vacío tras una nueva lesión muscular de Lecoeuche, otro de los pocos que se salvaban de la quema hasta ahora.

Casos aislados

Claro que tampoco las alternativas derriban la puerta. Es el caso de Mouriño, cedido desde el Atlético para completar una zaga de altura pero incapaz hasta ahora de mostrar la incuestionable calidad que atesora.

El panorama no mejora en la medular, donde solo Francho Serrano dispone de cierta coartada tras haber permanecido lesionado durante dos meses. El canterano, de lo menos malo en Albacete, se sitúa algún peldaño por encima de Marc Aguado, Grau o Mesa, demasiado irregulares, y alguno más sobre Moya o Bermejo, dos de las principales decepciones hasta ahora junto a Bakis (lesionado y aún sin marcar) o Manu Vallejo.

Mollejo, máximo goleador del equipo junto a Mesa con tres tantos, tampoco está entre los peores del curso. Ni Azón o Valera, ambos, en todo caso, lejos de su mejor versión. 

Claro que, seguramente, el que sale peor parado del análisis individual es Poussin, cuyos graves errores han costado puntos al equipo y el puesto al francés. Rebollo, titular ahora, no estuvo mal en Albacete pero no marca la diferencia como sí lo hace Cristian, cuya sombra sigue siendo demasiado alargada.