Al menos 53 personas han perdido la vida y otras 14 permanecen desaparecidas a causa de las lluvias torrenciales que azotan desde el martes el centro y el norte de Corea del Sur, informó ayer la Agencia Nacional de Gestión de Desastres del país asiático. Varios corrimientos de tierras en distintas zonas del sur de la ciudad de Seúl ocasionaron 16 muertos, un desaparecido y unos 20 heridos, según las autoridades, que inicialmente habían informado de cinco víctimas mortales sepultadas por el lodo.

Además, una avalancha de lodo provocó tres muertos, un desaparecido y dos heridos graves en una imprenta de la ciudad de Paju, a 30 kilómetros al norte de Seúl, según los datos recogidos por la agencia local Yonhap. En la provincia de Gyeonggi, la crecida de un río dejó al menos seis fallecidos, que se suman a los trece que perdieron la vida en la madrugada del miércoles en Chuncheon, a unos 100 kilómetros al este de Seúl, por otro alud que sepultó un hostal y varias casas y causó también cuatro heridos.

Las lluvias, las más intensas en Corea del Sur en el último siglo, según la agencia Yonhap, también han dejado a 9.440 personas sin hogar en Seúl y en la provincia de Gyeonggi, mientras otras 2.036 residentes en Paju y zonas cercanas fueron evacuadas ante el peligro de inundaciones y desprendimientos de tierra.

Las precipitaciones, que han desbordado ríos y provocado inundaciones y desprendimientos, han causado cortes de electricidad en cerca de 126.000 viviendas, además de anegar unas 2.500 casas y 760 hectáreas de terrenos agrícolas. En Seúl, las lluvias han causado aludes en montes, inundado diferentes puntos de la ciudad y elevado peligrosamente el nivel del río Han, lo que ha provocado el corte de las principales carreteras vecinas, informó la televisión KBS.