De los 600 habitantes con los que cuenta La Restinga, solo vivían en la localidad actualmente unos 250 vecinos. En cuanto les dieron el aviso, los habitantes se concentraron en el campo de fútbol de la localidad donde estaban varios efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME). Desde allí, abandonaron el municipio tanto en vehículos privados como en diferentes autobuses. El alcalde de El Pinar, Juan Miguel Padrón, precisó que muchos vecinos aún no habían regresado a la localidad tras el primer desalojo.