Los tiempos han cambiado mucho. Antes la única forma de comprar calzado era ir a una tienda física y adquirirlo, lo más normal del mundo, pero los hábitos de compra han cambiado radicalmente en los últimos años y cada vez son más personas las que se comprar ropa o calzado por internet.

Esta forma de comprar tiene sus ventajas y sus desventajas. En cuanto a los puntos a favor está la posibilidad de, sin moverte de casa o del lugar en el que estés, comprar cualquier producto. Además, el catálogo es muchísimo más grande, ya que puedes comprar en cualquier parte del mundo y seguro que hay un producto que te encante y te cautive. Y eso por no hablar de la comodidad que supone que te los traigan a casa.

Ahora bien, este último punto implica que hay que esperar unos días o unas horas a que te llegue y, sobre todo, que no te puedas probar los zapatos o las zapatillas.

Todos lo tenemos en casa

Cuando ya llegamos a la vida adulta sabemos nuestro número de pie, pero siempre es bueno afinar ya que, en según qué marcas o qué tipo de calzado podemos llevar un número y, en otros casos, uno más o uno menos.

Además, lo más normal del mundo es que los dos o tres primeros días, hasta que el calzado se haga a nuestros pies, nos moleste un poco. Pero no te apures porque hay un remedio casero con un producto que todos tenemos en casa, ya que es un básico e imprescindible de nuestra alimentación y es emplear una patata.

Coge una patata grande, quítale la piel, sécala y ponla dentro del zapato. Déjalo reposar durante 10 o 12 horas y luego quita la patata del zapato. El zapato debe tomar la talla deseada. Si sigue apretado, repite el proceso al día siguiente.

De todos modos, hay otro método del que ya te hablamos y que puedes emplear y es usar el spray dilatador zapatos y zapatillas que tiene a la venta Mercadona en sus lineales.