Michael Douglas y Catherine Zeta-Jones han elegido el Mediterráneo para pasar un mes de vacaciones y disfrutar de largos paseos en un yate que han alquilado. En sus planes está recorrer Turquía, Grecia y la Costa Azul, donde se encuentran ahora, concretamente, en la lujosa Saint Tropez, refugio de multimillonarios, modelos y estrellas de cine.
El matrimonio, al que acompañan sus hijos Dylan, de 11 años, y Carys, de 8, se encuentra muy recuperado de sus respectivos problemas de salud. Douglas, de 66 años, ha superado un cáncer de garganta que le obligó a someterse a un intenso tratamiento en los últimos meses. Mientras que Catherine Zeta-Jones tuvo que ingresar en un centro para recuperarse de una depresión provocada por el drama que tuvo que afrontar su marido.
La actriz confesó públicamente que sufría un trastorno bipolar, que alterna períodos de euforia con otros depresivos. Ahora, las aguas han vuelto a su cauce y ambos están en un buen momento, felices y con ganas de pasarlo bien con sus dos hijos.
El matrimonio combina los baños de mar con las visitas a tierra para comer en los mejores restaurantes, como el Club 55, frecuentado por famosos como Giorgio Armani, Beyoncé, el líder de U-2, Bono, Penélope Cruz, Jack Nicholson, Carolina de Mónaco, Sarah Ferguson, George Clooney y Hugh Grant.
COMPRAS Y MASAJE El lunes, la actriz galesa fue fotografiada al bajar del barco para ir de compras, vestida con una túnica estampada con sendas aperturas a los lados que dejaban al descubierto sus largas piernas, y una espectacular pamela. Posiblemente fue a una de las tiendas de las firmas de lujo que hay en Saint Tropez, y quizás también al mercado de la Place aux Herbes, donde se venden frutas, verduras, flores y pescado fresco.
Y mientras Catherine se perdía por las calles de Saint Tropez, Michael se quedaba en el yate con los niños y aprovechaba para darse un masaje relajante en la cubierta.
