SEGURIDAD CIUDADANA

El entorno de Doctor Cerrada en Zaragoza ya cuenta con las primeras cámaras de videovigilancia

Está previsto que el sistema de vigilancia esté operativo a finales de abril

Una de las cámaras, instaladas en la calle de Hernán Cortés

Una de las cámaras, instaladas en la calle de Hernán Cortés / EL PERIÓDICO

El Periódico de Aragón

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El sistema de videovigilancia por medio de cámaras de seguridad a pie de calle ha sido una de las soluciones a las que ha recurrido el Ayuntamiento de Zaragoza para controlar los altercados en las zonas calientes de la capital aragonesa como, por ejemplo, El Gancho. Ahora el entorno de Doctor Cerrada ya ve de cerca la puesta en marcha de esta medida con la instalación de las primeras cámaras, como así se ha hecho ya en la calle Cortes de Aragón.

Se trata de uno los 14 dispositivos que se ubicarán en las calles Ricla, Dato, Fita, Princesa y las zonas de Cortes de Aragón y Doctor Cerrada donde convergen estas calles. Este contrato se adjudicó por 174.643,61 euros, IVA incluido, a la empresa Orbe Telecomunicaciones S.L., quien cuenta con un plazo de diez semanas para ejecutar la instalación desde que se suscribiera por escrito.

Los datos que obtendrán las cámaras de seguridad garantizan el derecho a la privacidad y, de hecho, no se podrán tomar imágenes ni sonidos del interior de las viviendas contiguas ni de los vestíbulos de los edificios.

Esta medida de seguridad llega después de la Jefatura Superior de Policía de Aragón se viera obligada a reforzar la seguridad tras los robos violentos y las agresiones al colectivo LGTBI ocurridas entre noviembre y diciembre de 2021.

En este sentido, las cámaras tendrán dos funciones: identificar a los individuos implicados en loas altercados y convertirse en «un potente método disuasivo». Para esto último, una extensa red de carteles anunciará que la zona está siendo controlada por este tipo de cámaras.

Se trata de un refuerzo de la seguridad que hará realidad una reclamación vecinal que se remonta varios años atrás, cuando la banda latina Dominican Dont Play se atribuyó el asesinato de Sami Hamidi. El crimen se perpetró en 2018 en la calle Princesa, donde este joven de 20 años fue asesinado por un corte con un machete en la femoral.