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Zaragoza: Las nuevas piscinas de La Almozara, a la espera de volver a licitarse este año

Serrano anunció en abril que se lanzaba el concurso pero será ahora cuando se haga

Protesta vecinal, el pasado mes de septiembre, para pedir la construcción de las piscinas de La Almozara.

Protesta vecinal, el pasado mes de septiembre, para pedir la construcción de las piscinas de La Almozara. / EL PERIÓDICO

Iván Trigo

Iván Trigo

Construir unas piscinas en La Almozara son una de las principales demandas de los vecinos de este barrio zaragozano, que llevan lustros escuchando promesas por parte del ayuntamiento. En el mandato anterior, el Gobierno municipal de PP y Cs llegó a adjudicar las obras, pero la empresa contratada renunció al proyecto. Entonces, el área de Urbanismo tuvo que iniciar todo el trámite de nuevo, pero son ya varios los anuncios que se han hecho desde entonces y la paciencia de los vecinos no es infinita.

El pasado mes de noviembre, el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza, Víctor Serrano, anunció que el Gobierno de la ciudad había aprobado someter a información pública el anteproyecto de las piscinas, un trámite necesario que ya ha finalizado y en el que los vecinos han presentado alegaciones para modificar la propuesta impulsada desde el ayuntamiento.

Esas alegaciones de los vecinos tienen que ser revisadas ahora por los técnicos para revisar si es viable incorporarlas al anteproyecto o no. Y una de ellas parece difícil de cumplir a estas alturas, y es que hay quien ha pedido que las nuevas piscinas se construyan en el aparcamiento sur de la Expo y no en la parcela prevista, situada entre la avenida Ciudad de Soria, Fray José Casanova y Lago y el parque de La Aljafería. Según recuerdan fuentes vecinales, Jorge Azcón, cuando era candidato a la Alcaldía en 2019, anunció que ese sería el emplazamiento del recinto si se convertía en primer edil, lo que acabó ocurriendo.

Otro de los aspectos que ha levantado suspicacias es el aparcamiento que se plantea junto al equipamiento. En un principio iba a tener 500 plazas, pero se redujo a 250. Los vecinos piden es que sea gratuito y no se «privatice» ni dependa de la empresa que gestionará las instalaciones de las piscinas. También que se explicite que todas las actividades estén sujetas a precios públicos. Y es que después de tanto tiempo, los vecinos comienzan a hartarse. Cierto es que hasta ahora, nunca había existido un anteproyecto tan definido y un camino trazado para construir las piscinas. Y verdad es también que si no fuera por la renuncia del anterior adjudicatario, estas instalaciones ya estarían construidas. Pero en el último año se ha anunciado la reapertura del proceso en más de una ocasión y las máquinas nunca llegan al terreno.

Y es que en abril, un mes antes de las elecciones municipales, el concejal de Urbanismo anunció que el Gobierno municipal había aprobado sacar a licitación de nuevo las obras, pero el concurso para adjudicar la construcción y gestión de este equipamiento no llegó a lanzarse.

Pleno en la junta de distrito

Pasaron las elecciones, el PP volvió a gobernar y, en noviembre, Serrano anunciaba que el proyecto de las piscinas de La Almozara se relanzaba. Eso sí, no se iba a licitar de inmediato, sino que primero debía someterse a información pública. No obstante, el concejal de Urbanismo afirmó entonces que los trabajos para levantar el nuevo equipamiento se iniciarían este 2024.

El siguiente paso debe ser ya sí abrir de nuevo el concurso para recibir ofertas. Y habrá que ver si se presenta más de una empresa y no como ocurrió la vez anterior, cuando solo se presentó que, además, acabó renunciando después de haber rechazado cobrar el canon que ofrecía el consistorio, lo que le impidió acceder a la financiación necesaria para construir el complejo deportivo, que supondrá una inversión de 18 millones de euros.

Este jueves, el pleno de la junta municipal de La Almozara tratará el asunto de las piscinas, donde ha sido invitado Serrano para explicar el proyecto y los plazos previstos. La última vez que este órgano trató el asunto acabó en polémica por la no comparecencia del concejal de Urbanismo, que alegó que no había sido invitado con tiempo suficiente.

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